El Grupo GEP, conformado por inversionistas locales, ha venido trabajando desde hace cinco años en esta idea para revalorizar neumáticos fuera de uso, particularmente los de la gran minería.
La planta de pirólisis, emplazada sobre doce mil metros cuadrados en el barrio industrial de El Peñón, cumple los estándares medio ambientales y las normas ISO correspondientes, por lo que ya está en condiciones de entrar en régimen productivo.
Es la primera planta de pirólisis de la región y una de las más modernas de latinoamérica. Certificada según las exigencias de la Ley REP.
A ese punto en la zona industrial de El Peñón, a unos siete kilómetros al sur del pueblo y a 300 metros de la carretera, se ubica esta novedosa instalación, idea de empresarios e inversionistas locales, que fueron visitados por la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, el alcalde de Coquimbo, Ali Manouchehri, y otras autoridades.
En Chile se desechan cada año casi 7 millones de neumáticos, tanto del parque automotriz como de actividades productivas como la minería, situación de la que no es ajena la comuna puerto, por lo cual es importante contar con emprendimientos que permitan reducir este tipo de elementos.
El alcalde Ali Manouchehri, como dueño de casa, agradeció la visita de la ministra Rojas para conocer iniciativas innovadoras respecto al reciclaje de un producto tan contaminante como son los neumáticos, «que se encuentran en distintas partes del territorio, lo que también va ligado a la protección del medio ambiente y su reutilización. Felicitar a la empresa y agradecer al ministerio, al Presidente Boric también, porque nos ha permitido ir avanzando en políticas junto al gobierno, así es que estamos muy contentos».
La ministra Rojas recorrió en detalle la moderna planta y se interesó en conocer el proceso de descomposición. Del neumático trozado, finalmente se obtienen negro de humo, acero, petróleo y algo de gas licuado, que se reutiliza en el mismo horno pirolítico.
La autoridad de gobierno destacó el interés de GEP Coquimbo de hacerse cargo «de la valorización de neumáticos, una parte fundamental de la Ley REP, que comenzó el año pasado con las metas de valorización de este elemento y que va a comenzar a funcionar prontamente».
Esta planta de pirolisis tiene una capacidad de procesar 1500 toneladas al año de neumáticos en desuso, lo que conlleva la generación de gas, petróleo, carbón black y acero, y busca integrarse a la cadena de valor de las empresas generadoras de residuos.
Además, con el calor que se produce en el proceso y que sale a la atmosfera, se busca captarlo y utilizarlo en una planta deshidratadora, que podrá ser usada, por ejemplo, en el procesamiento de algas de Playa Changa.
Mauricio Gómez, socio y gerente de la planta, explica que ya reciben neumáticos para iniciar su funcionamiento normal a mediados de marzo.
«Es una planta que hará desaparecer los neumáticos, generando una serie de materias primas para otros procesos productivos. Son dos proyectos a corto plazo. Uno es poder procesar las correas transportadoras del mundo de la minería y otros sectores económicos que hacen uso de ellas, y tenemos un proyecto que, a mi juicio, es el proyecto social de nuestra empresa, porque queremos tener generación de energía, ojalá para una planta deshidratadora a costo significativamente más bajo que lo que hace el mercado».
La seremi de minería, Constanza Espinoza, reconoce que «minería y medio ambiente no tienen por qué ser excluyentes, sino que tenemos que buscar la forma de mejorar los procesos y de trabajar en conjunto, colaborativamente, para buscar un mejor futuro», concluyó.
Los neumáticos deben previamente ser pesados en la romana del MOP, ubicada en la ruta a Ovalle, cerca de la planta GEP Coquimbo. De ahí en adelante el proceso es interno. Cada subproducto tiene otros destinos.
El Grupo GEP SPA está conformado por varios socios en distintos grados de participación. Es gerente general Mauricio Gómez, ingeniero comercial; gerente de producción es el experto y socio Yani Eistrupp; y el gerente jurídico es el abogado Jaime Muñoz.
