Montado en su bicicleta, Héctor Guerrero, que sufre parálisis cerebral y una parálisis muscular, baja unas pocas veces al centro de La Serena desde su casa ubicada en La Florida, y este vehículo de dos ruedas se transforma en su medio de transporte. Pero señala que sus pocos viajes hasta el centro no son porque quiera, sino porque acusa discriminación por parte de los colectiveros y micreros que no paran o se excusan diciendo que su bicicleta no cabe en el portamaletas y se van, dejando a Héctor en la calle.
El joven señaló que lo han insultado, pero lo que más le dolió fue cuando un chofer le dijo «no te llevo porque te puedes mear en el auto, eso es lo que más me molestó y me hizo sentir mal, porque me ven y creen que yo no puedo controlar mis necesidades, pero no es así».
Héctor contó que este tipo de acciones ocurre constantemente y que el jueves pasado, cuando quería regresar a su casa en compañía de un amigo, estuvieron esperando colectivo en el sector del Cuerpo de Bomberos en la Avenida de Aguirre por horas, ya que todos los choferes les decían que no llevarían a Héctor y hacían pasar a otras personas que estaban en la fila.
Esta situación de discriminación permanente llevó a este joven a denunciar el hecho ante la Seremía de Transportes y Telecomunicaciones dejando constancia de la negativa, las excusas e incluso la partida de los vehículos vacíos o con pocos pasajeros. «Solo me discriminan por mi discapacidad, yo hago la fila para tomar colectivo, tengo el dinero para pagar el pasaje y uno de los conductores del vehículo con patente ZG-4802 de la Línea 71 se dio a la fuga con menos pasajeros para no llevarme».