Ante las pérdidas millonarias que acusaron locatarios establecidos que trabajaron durante la Pampilla 2024, se han generado protestas de comerciantes en el edificio Consistorial y duros emplazamientos al municipio porteño. Críticas a las que se suma el concejal y candidato de alcalde Felipe Velásquez, quien coincide con la tesis de los comerciantes haciendo alusión a la devolución de dineros de los remates.
El hecho es que los comerciantes no hayan sido recibidos por el alcalde antes de que este dejara el puesto por tema de campaña. «Nosotros entendemos que el alcalde debe escuchar a todas las personas, en especial aquellas con las cuales tuvo un contrato, entre comillas, con el que él prestó un servicio como lo es el tema de la Pampilla, donde debió haber escuchado ahí a las personas, lo cual no hizo», cuenta a este medio el abogado.
El hijo de Pedro, que se vio enfrentado con el equipo del alcalde en la sesión del pasado miércoles. Ya que interpeló por el hecho de que los locatarios no hayan podido expresarse públicamente en la trasmisión la demanda. «Se perdió la oportunidad de haberlos escuchado frente a los concejales y frente a la opinión pública, que era lo más importante, en conjunto con la administración», dijo el fiscalizador.
En ese contexto, asegura que a los establecidos no les quedarían otra que seguir la lucha por vía judicial. «No debe ser fácil tener que invertir en tu proyecto, en este caso en la Pampilla, para salir para atrás. Y todo eso se debe a un desorden donde no hubo un control ni seguridad, si bien hubo carabineros, no hicieron el trabajo como correspondía por la cantidad de asaltos y robos que hubo».
El tema de la Pérgola es recurrente en estas horas, y es que los 90 afectados aseguran que se privilegió ese espacio en desmedro de los que pagaron patente. «Yo siento que hubo una especie de discriminación por parte de ellos (municipio). Nosotros presentamos un oficio solicitando cuáles fueron los criterios para el otorgamiento de esos permisos, porque vimos que empresas como Guayacán, de cervezas artesanales, estaban en la Pérgola al lado del escenario, donde además tenían resguardo de seguridad privada, totalmente distinto de lo que ocurría en la parte de atrás, donde estaba la gente del pueblo».
