Se espera que durante más de una semana, los atardeceres de la región den paso al fenómeno astronómico más comentado en lo que va del año.
Desde su descubrimiento en 2023, el cometa de nombre científico C/2023 A3, bautizado como «el cometa del siglo», ha llamado la atención en todo el territorio nacional, ya que prometía ser el evento astronómico más importante para el presente año.
Esto, debido a que su órbita lo convertiría en un visitante para nuestro sistema solar que podría ser visto a simple vista en peregrinación por nuestro barrio espacial.
Hace un par de semanas, durante su salida y entrada a su perihelio (momento más cercano al sol), el cometa, también conocido como Tsuchinshan-ATLAS, pudo ser observado a horas de la madrugada sobre la cordillera, antes de la salida de nuestro astro rey, dejando imágenes increíbles por todo el mundo.
La buena noticia es que, si te lo perdiste, desde la próxima semana tendrás una segunda y última oportunidad de ver el cometa, así nos lo comenta el Magister en Física con mención en Astronomía y Profesor del Departamento de Física de la Facultad de Ciencias de la Universidad de La Serena, Erich Wenderoth. «Ahora ya está escondiéndose por detrás del sol (…) por lo tanto, no es visible, pero al asomarse por el otro lado de su órbita va a aparecer, pero ahora al atardecer».
De la cordillera al mar
Tal y como han comentado diversos expertos en la materia, el cometa ATLAS venía acompañado de la posibilidad de ser visto desde nuestro planeta durante dos periodos distintos, esto debido al tipo de órbita que tiene. «El cometa tiene una órbita retrógrada, eso significa que está orbitando en torno al sol en un sentido contrario al resto de los planetas, los planetas vamos en sentido contrario a los punteros del reloj y este cometa viene a favor de los punteros del reloj», explica el profesor Erich Wenderoth.
Esto haría que durante su curso primero fuera visible antes del amanecer, justo por donde sale el sol, mientras que en esta segunda oportunidad lo haría por la «vereda del frente» justo después del atardecer. «Va a empezar a ser visible después de la puesta del sol, cuando el sol ya esté bajo el horizonte y empiece el crepúsculo. Cada tarde va a estar un poquito más alejado del sol, entonces vamos a poder verlo al atardecer de manera mucho más clara, hacia el horizonte noroeste», afirma el magíster en física.
Más o menos visible
Al consultar sobre el brillo que parecen desprender estos cuerpos que viajan por el espacio, explica que en verdad no es un efecto provocado por el cometa en sí, sino que se trata de la reacción de los componentes químicos del mismo, normalmente en estado de hielo, al recibir el calor y radiación emitida por un sol. «Dependiendo de la distribución y abundancia de sus distintos componentes, la sublimación de esos gases produce la coma, que es la esfera luminosa alrededor del núcleo del cometa».
Pero, ¿será más visible durante esta segunda pasada? Es una probabilidad, el profesor Wenderoth cuenta que la magnitud de su brillo podría aumentar. «Está el brillo de primera magnitud, magnitud 1.5, que significa visible a simple vista. Es posible que sea un par de magnitudes más brillante ahora, cuando lo veamos al amanecer a partir de la próxima semana, del 11 de octubre hacia adelante».
La mejor y única oportunidad
En su primera vuelta brillando en nuestro cielo, la recomendación era buscar sitios elevados y libres de iluminación artificial para lograr un buen avistamiento, en esta segunda oportunidad, debido al lugar dónde se presentará el cometa, bastará con mirar al horizonte, en caso de nuestra región, en dirección al mar para encontrar al astro. «Es cuestión de pararse en la Avenida del Mar o en cualquier lugar de La Serena con vista al horizonte, esperar que el sol se ponga y a medida que se vaya oscureciendo el crepúsculo, va a empezar a destacarse en el fondo de cielo; mientras más oscuro esté, más visible va a ser».
Si bien el cometa podrá ser visible en el atardecer desde el 11 de octubre en adelante, con el pasar de los días, al alejarse este del sol, su visibilidad irá en aumento, debido a que hará acto de presencia en el firmamento cuando nuestro sol esté ya muy por debajo del horizonte.
Así será hasta que abandone definitivamente el espacio afectado por el viento solar proveniente de nuestra estrella madre.
