Una opinión dividida tienen los feriantes de San Juan de Coquimbo, respecto al traslado de sus puestos a calle Juan Rodolfo Marín, motivada por la construcción del mirador de calle Manuel Jesús Rivera que ocupan tradicionalmente, ya que para algunos de los comerciantes su nueva ubicación no le favorece en el tema de ventas, mientras que otros opinan que sus ganancias sí han mejorado.
Entre quienes no están conformes con el cambio está Wilda Álvarez, del sindicato Maestranza, quien criticó la decisión de retirarlos de su sector original cerca de calle Santiago Amengual, señalando preferencias por otros sindicatos.
«Este cambio es pésimo, porque antes nosotros estábamos cerca de la Feria de las Pulgas, pero nos retiraron para esta calle Juan Rodolfo Marín, y en la calle donde están construyendo el mirador estaba el sindicato de chacareros y otros más pero solo nosotros fuimos quienes tuvimos que salir para cederles el lugar a ellos y nos dejaron acá».
Añadió que espera que la autoridad municipal busque una mejor ubicación para que llegue más público y por ende mejoren sus ingresos, «estamos conscientes que ya no vamos a poder conseguir nuestro espacio físico anterior, pero sí queremos que nos den una mejor lugar para tener ganancias y yo pienso que el mejor lugar es al lado del liceo Estado de Israel, porque allá está más amplio, pero acá la gente no llega porque la gene entra por el otro lado y los que quedaron allí se están llenando los bolsillos de plata y nosotros quedamos con los bolsillos pelados».
Una opinión diferente tiene el comerciante Aladino Gómez, del sindicato Río Elqui, quien afirmó que en su caso sí ha tenido buenas ventas, «acá estamos bien, queremos quedarnos y ojalá el alcalde Cristian Galleguillos se ponga la mano en el corazón y vea que acá estamos bien, porque ahora estamos mejor que antes, porque estábamos estorbando a la posta y al Cuartel de los Bomberos y acá estamos mejor y las ventas son buenas».
