«No estamos para darnos gustitos personales», señalaron algunas concejalas al abandonar la sala, quitando el voto y quorum tras elección en concejo extraordinario. Otros acusaron falta de respeto.
El nombre debió zanjarse ayer, en sesión extraordinaria del Concejo Municipal. Sin embargo, la falta de quórum evitó que así ocurriera, y el cargo de alcalde sigue pendiente, al menos hasta este miércoles, cuando nuevamente se deba votar.
Porque el de ayer no fue un concejo cualquiera. Por eso, una primera conversación con el secretario municipal, el alcalde (s) y directivos. También una reunión a puertas cerradas solo entre concejales para discutir a fondo las distintas miradas y opiniones sobre la situación, luego que el Tribunal Electoral Regional (TER) destituyera -hace unas semanas- del cargo al ex edil Roberto Jacob, tras ser acusado por «notable abandono de deberes».
Al final, como señala la concejala Carmen Zamora, «lo que hubo fue mantener la pequeña política, mirar en pequeñito y tratar de ser protagonistas por un par de semanas en un cargo que nosotros queremos que siga el administrador, regularizando todo lo que deba hacer y gestionando lo que falte. Falta tan poco para que asuma la nueva administración y por eso consideramos que no es necesario poner a una tercera persona».
Precisamente Zamora, junto a Daniela Molina, Pamela Salomé y Rayén Pojomosvky, se retiraron de la sala porque dos concejales (Cristián Marín y Camilo Araya) manifestaron su interés en ser alcaldes suplentes, «y no estábamos de acuerdo que aquello sucediera».
Habrá una nueva citación para este miércoles, «pero consideramos que debemos ser coherentes y no podemos estar buscando personalismos para este periodo, que además es súper importante para los funcionarios y la comunidad. De verdad que no estamos para darnos gustitos personales cuando en la política pública debemos ser responsables, tratar de enaltecerla y no exponerla a este tipo de situaciones».
Es innecesario
El 6 de diciembre asumirá Daniela Norambuena (RN) y la postura de Pojomosvky es dejar que el administrador municipal (Luis Henríquez) continúe hasta el cambio de mando, considerando la importancia del traspaso, además de la estabilidad administrativa que requiere este último mes.
«No me parecía que uno de los colegas asumiera este cargo, porque es completamente innecesario considerando los pocos días que faltan», agrega.
Y a pesar de la discusión extensa y los argumentos entregados, «ambos colegas se quisieron proponer, y expuse la poca confianza que tengo hacia ellos en términos políticos, por lo que decidí abandonar el concejo, como también otras colegas, quedando sin quorum esta votación. No estamos para darnos gustitos políticos personales y quedó en evidencia más el ego que los acuerdos políticos».
El objetivo, explica Daniela Molina, es hacer un traspaso ordenado, «siempre pensando en el bien mayor de la comuna, y no darse gustos personales, que no son pertinentes con el momento que vive la comuna».
Falta de respeto
Camilo Araya lamenta lo ocurrido, que se da principalmente «por una interpretación de parte de algunas concejalas, cuando la ley es clara y señala que eso -que asuma el administrador- no corresponde, sino que debemos elegir al edil suplente».
Tampoco aplaudió que abandonaran la sala, «porque cuando asumimos el cargo prometimos ser respetuosos de las leyes, y de acuerdo a la ley nos quedamos algunos y procedimos a la votación, que estuvo entre Cristián Marín y yo…».
Finalmente se hicieron dos votaciones y en ambas no se alcanzó la mayoría. «De acuerdo al reglamento, norma y ley, correspondía que quedara el concejal con más votos, y en este caso era yo, pero al abandonar la sala quitan su voto y quórum. ¿Gustitos personales? No es eso, sino ser rigurosos y respetuosos de la ley y no hacer interpretaciones…».
Molestia también existía en Félix Velasco, toda vez que el tema de fondo, desde su perspectiva, «es que debemos respetar el mandato constitucional, y en caso de vacancia, suspensión o destitución del alcalde, la ley es clara y dice que se debe votar dentro de los concejales».
Independiente del poco tiempo que estará en el cargo -menos de un mes-, «hay que buscar soluciones, porque se necesita una figura política que gestione y dé soluciones, así que no entiendo ese afán de querer buscar una vuelta a la interpretación, cuando la ley es clara, y segundo, es una terrible falta de respeto a la ciudadanía que estando en votación, colegas se paren y se vayan porque no les gustó la idea…».