A las 00:00 horas de este miércoles, los trabajadores de Correos de Chile de La Serena y Coquimbo adhirieron a la huelga nacional en exigencia de mejoras salariales y luego agotadas todas las tratativas de negociación entre las partes.
Los trabajadores adscritos al sindicato en La Serena y Coquimbo son unas 150 personas, y hasta el momento, está el 100% en huelga legal.
El delegado sindical de La Serena, Luis Rojas, señaló que «los trabajadores pedimos un sueldo real y sustentable para todos los trabajadores por igual, pedimos también que la negociación sea a dos años, y un bono por término de conflicto acorde a la realidad que se está viviendo». Agregó que la empresa solo ofrece realizar reajustes solo cada cuatro años y no dos como exigen los trabajadores, quienes, en un gran número, solo ganan el sueldo mínimo.
Luis Araya, dirigente del sindicato de La Serena, manifestó su molestia con la poca acogida que han recibido de parte de la empresa, una empresa que, a fin de cuentas dijo, pertenece al Estado.
«Nosotros somos una empresa del Estado, el gobierno no puede decir que nos arreglemos con el alcalde o los municipios, no, porque el gobierno es dueño de esta empresa. Lo que nosotros estamos pidiendo no es algo del otro mundo, solo estamos pidiendo que se mejoren nuestros sueldos según como se ha encarecido el costo de la vida», señaló Araya.
Incluso, los dirigentes señalaron que los funcionarios más expuestos son los carteros, quienes enfrentan una serie de riesgos como ataque de perros, atropellos y asaltos; y aún así, su salario es inferior al resto, sabiéndose que están en constante riesgo.
Los dirigentes pidieron disculpas a la comunidad, y los conminaron a entender sus demandas, ya que desde hace meses que las mesas negociadoras no llegaban a buen puerto.
La huelga, por el momento, es de carácter indefinida, hasta que se logre el consenso, pero los dirigentes estiman que no debiera durar más de dos o tres días.
Cabe destacar que en La Serena, se concentró la manifestación de los huelguistas, la cual se desarrolló de forma pacífica en las afueras de la dirección regional de Correos, informando a la comunidad, y luego realizando una pequeña marcha por el centro de La Serena.
