Aunque con los turnos éticos se mantiene la entrega de algunas cédulas de identidad, pasaportes y certificados de antecedentes se están realizando lentamente en las oficinas regionales, los funcionarios siguen pidiendo mejoras laborales para todos los trabajadores y no para una parte como fue la última oferta del Ejecutivo.
Nicolás Véliz J.
La Asociación Nacional de Funcionarios del Registro Civil (Anercich) continúa con el paro de actividades que sostienen hace más de tres semanas para exigir que el Gobierno mejore las condiciones laborales de cerca de dos mil 200 trabajadores.
Una de las representantes de los funcionarios en paro en la Cuarta Región, Gloria Calderón, señaló que la mañana de ayer se volvió a rechazar la oferta del Ejecutivo porque esta no contemplaba al 100% de los trabajadores, dejando a cerca de 500 fuera de las negociaciones.
Los trabajadores analizaron ayer la última propuesta del Ministerio de Justicia para destrabar el conflicto, que consistía en un aumento de un grado para quienes llevan más de 4 años trabajando en el Servicio, sin embargo los trabajadores pedían aumento de dos grados para todos por igual, por lo que, ya han adelantado que la propuesta no cumple con sus objetivos.
El gremio espera una nueva propuesta que integre también el incremento en el bono de satisfacción al usuario y a los servicios que prestan los trabajadores con los matrimonios civiles a domicilio.
Calderón afirmó que el Ejecutivo está «arreglando» a tan solo 1.600 funcionarios de 2.084 trabajadores que son.
Los denominados turnos éticos siguen funcionando, se están inscribiendo las defunciones, nacimientos y se están llevando a cabo los matrimonios agendados.
En la Dirección Regional ubicada en calle Matta se están realizando capturas de cédulas de identidad, pasaportes y certificados de antecedentes.
Otro de los puntos que critican los funcionarios es la entrada en funcionamiento del nuevo sistema computacional que debió comenzar a operar en el mes de marzo del próximo año y que se adelantó al mes de agosto pasado, «el sistema no es operable en un 100% y eso nos va a crear un tremendo problema cuando se vuelvan a abrir las puertas y tengamos que atender a los usuarios y el sistema no esté operable».
La Anercich cuenta con el apoyo de la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF).
