El próximo 5 de abril se desarrollará en Santiago el Consejo Regional de Renovación Nacional, con una importante impronta, será de carácter doctrinario, puesto que debiera ajustarse la declaración de principios del partido de la estrella tricolor, documento que tiene más de 25 años y cuya última modificación se hizo en 1994.
Lo que pretenden en el partido es actualizar la declaración a los objetivos para las próximas décadas que tienen en la colectividad. Asimismo se han establecido temas primordiales como son medio ambiente, el rol de la mujer, los derechos sociales, laborales y la defensa de la ciudadanía, además de un largo etcétera.
El presidente comunal de RN en La Serena, Pablo Portilla, señaló que la declaración de bajo la época de Pinochet, antes del plebiscito, con un escenario muy distinto a la realidad de hoy. De hecho, el comunal de La Serena desarrolló desde enero hasta la semana pasada una serie de debates en torno a la necesidad de actualizarse en torno a la temática que hoy está en discusión: los 25 puntos de la declaración de principios.
«En torno a eso pudimos establecer consenso entre todas las personas que participaron voluntariamente en estas mesas redondas, donde emergió una propuesta de modificación, donde modificamos la mayor parte de estos 25 puntos, incluso unimos algunos puntos y se crean algunos otros, y se obtiene como resultado un documento de 24 puntos en donde hay cambios estructurales», comentó Portilla.
El dirigente agrega que «debemos dejar atrás el anclaje con el Golpe de Estado del 73’ (…) Cualquiera institución que aspire a prevalecer en el tiempo debería dedicar su quehacer en principios universales y trascendentes, y por tanto, no caben las menciones a hechos históricos puntuales. Eso termina amarrándonos a un momento del tiempo».
Para Portilla, la idea no es cambiar todo de manera radical, sino cambiar una parte importante que necesita actualizarse, así como también el rol de las Fuerzas Armadas y de Orden, ya que a su juicio deberían ceñirse a su rol que indica la Constitución y no «como garantes de la institucionalidad y de referentes de la nacionalidad, cosa que no les cabe en un sentido profesional». En esta declaración también cabe, según Portilla, alejarse de los calificativos de izquierda, como el marxismo, el proletariado, entre otros.