Concretada la limpieza de escombros de los locales que fueron destruidos en la madrugada de jueves por un serio incendio que destruyó a 17 pescaderías y a las cocinas de 6 restaurantes del Sindicato Independiente del Terminal Pesquero de Avenida Costanera de Coquimbo, desde la madrugada de ayer el sector ya está cubierto por una carpa, razón por la que los locatarios y los trabajadores del terminal prosiguen con la reconstrucción. Afirmaron a Diario LA REGIÓN que literalmente van a «resurgir de las cenizas».
Coordinando la ayuda, el concejal porteño Alejandro Campusano señaló que la asistencia del municipio prosigue para dotar de servicios básicos a los puestos, en vista de que las obras internas prosiguen a buen ritmo, ya que la idea de los afectados es poder atender al público en dos semanas más.
«Con nuestro alcalde Cristian Galleguillos, los concejales y el Gobierno Regional, hemos brindado toda la asistencia a los trabajadores y dueños de locales que han hecho una gran labor en este corto tiempo y nuestros funcionarios también han colaborado con ellos día y noche para recuperar nuestra caleta con un plan de contingencia y agradecemos la gestión del empresario, el señor Shwarz, que nos facilitó esta carpa».
Una de las inquietudes planteadas ayer al concejal fue la de los socios del sindicato que no fueron afectados por el fuego, ya que hasta ayer en la mañana no contaban con agua potable a pesar de que habían pedido la reposición del servicio a la empresa sanitaria local. «Acabo de comunicarme con el gerente de Aguas del Valle para ver una solución a la falta de agua que es una necesidad urgente para que los demás locatarios puedan funcionar y creo que hoy día tendríamos solucionada esta contingencia», señaló.
Husmey Castillo, vicepresidente del Sindicato Independiente, manifestó un nuevo agradecimiento a todos quienes han contribuido a las faenas para reconstruir, en especial a sus vendedores, garzones y personal de cocina que tras el siniestro y durante todo el jueves y la jornada de ayer laboraron sin descanso. «Acá todos estamos en la misma lucha, los dirigentes y los dueños y acá hay que darles las gracias a nuestros trabajadores que no nos han dejado porque sufren lo mismo que nosotros, acá los vemos luchando para sacar esto adelante, que está complicado ya que ahora recién podríamos empezar a vender al cliente en 15 días más».