Imponente, hermoso, radiante, en un día diáfano, de sol, llegó a Coquimbo el bergantín goleta Buque Escuela Esmeralda de la Armada de Chile. Vuelve tras 9 años de ausencia, en este puerto. Ya horas antes del arribo a las 10 horas, había personas esperándolo.
Se maravillaron con su alba estampa y los cuatro palos con las velas: cuadras en el trinquete, velas cuchillas en el palo mayor proel, mayor popel, y mesana, que le valen el apelativo de «Dama Blanca» con el que es conocida a nivel nacional e internacional.
Diario La REGIÓN dialogó con el Comandante de la Esmeralda, Capitán de Navío Carlos Fiedler Pinto, quien dio a conocer los pormenores de la recalada del bergantín goleta que provino de invitar a los habitantes de la zona a visitarlo.
«El motivo principal de nuestra recalada es visitar esta hermosa Región de Coquimbo, después de 9 años y esta visita está enmarcada en el inicio de la celebración del Mes del Mar y las Glorias Navales en esta región y venimos en una visita de carácter oficial y en este primer día hemos venido a saludar a las autoridades locales y regionales con la que vamos a compartir un almuerzo protocolar y en la noche tendremos una recepción oficial».
El Comandante Fiedler dio a conocer también el sistema y horario de visitas generales en que los asistentes deben traer cédula de identidad para poder ingresar al puerto. «Este sábado las visitas de la comunidad pueden realizarse entre las 11:00 y las 18:00 horas y el domingo entre las 10:00 y las 15:00 horas, mientras que el buque zarpará el mismo domingo, concluyendo con la visita».
En cuanto a la tripulación, el oficial explicó que el contingente está compuesto por egresados de las escuelas de formación de la Armada los que están en preparación el 60 Crucero de Instrucción, cuyos destinos principales serán países europeos cuyo zarpe será el 31 de mayo desde Valparaíso para retornar a Chile el 6 de diciembre.
«El trabajo que estamos realizando es la preparación del próximo crucero de instrucción que será el número 60 en la historia del buque y ahora tenemos una dotación aproximada de 310 personas incluidas 34 damas a bordo y la mitad de quienes serán instruidos son principalmente jóvenes Guardiamarinas egresados de la Escuela Naval en su primer año como oficiales y en el año en que permanecen en ese grado, seis meses lo cumplen a bordo del buque en una instrucción que es una práctica a bordo y tenemos alrededor de 45 marineros que están en instrucción, egresados de la Escuela de Grumetes y la Escuela de Especialidades».
En 1946 la Armada de España ordenó a los astilleros Echavarrieta y Larrinaga de Cádiz la construcción de un velero, casco número 32 con el nombre «Juan de Austria» con el objeto de reemplazar al Buque Escuela Juan Sebastián de Elcano.
Pero en 1947, un accidente con una explosión en la Base de Defensas Submarinas provocó la destrucción del astillero, paralizando las obras del navío, situación que también causó un serio perjuicio económico al astillero que declaró la bancarrota, motivo por el que gobierno de España se hizo cargo de las deudas y creó la Sociedad de Astilleros de Cádiz S.A., en cuyas instalaciones quedó, sin concluir, con serios daños el casco del «Juan de Austria».
En 1950 a raíz de una acreencia entre el gobierno español y Chile por la adquisición de salitre tras la Guerra Civil española, surgió el interés el gobierno chileno por la nave y en 1951, bajo el mandato del Presidente de la República, Gabriel González Videla, fue dispuesta la construcción de bergantín goleta por US$ 2.980.000, de la época y el 23 de octubre de 1952, en Madrid, fue firmado el contrato de compra de un Buque Escuela en construcción que fue bautizado como Esmeralda, en conmemoración al nombre de la fragata capturada en El Callao por el Almirante Lord Thomas Cochrane, en la noche del 5 al 6 de noviembre de 1820 durante la campaña de Liberación del Perú.
El 12 de mayo de 1953, fue realizada desde las gradas de los Astilleros de Cádiz S.A. el lanzamiento del casco del Buque Escuela Esmeralda. El 15 de junio de 1954, la Sociedad Astilleros de Cádiz S.A. hizo entrega del buque al gobierno de Chile, y al día siguiente, el velero zarpó desde Cádiz al mando del Capitán de Navío Horacio Cornejo Tagle, con rumbo a Las Palmas de la Gran Canaria pasando por New Orleans en Estados Unidos para recibir una planta destiladora, arribando a Chile a Tongoy, puerto desde el que partió escoltado por la Escuadra Nacional hacia Valparaíso.