Luego de cuatro meses del robo de la corona de la virgen Candelaria, la PDI logró dar con su ubicación.
Fue en dependencias de la PDI de Copiapó donde los policías entregaron la corona al obispo, Monseñor Gaspar Quintana, y al rector del Santuario, Francisco Javier Medina.
El obispo agradeció la labor de la PDI y también de la comunidad, que fue clave en la recuperación de la pieza, ya que fue un vecino de los sectores altos de la ciudad quien retuvo la corona cuando una persona aún no identificada se la quiso vender.
El pastor se refirió al valor no sólo material de la corona, sino espiritual y patrimonial, destacando la importancia que tiene para los fieles la conservación de estos objetos.
El sacerdote luego llevó la corona hasta el Santuario, donde se espera que este 8 de diciembre se pueda hacer un signo especial de acción de gracias.
