La Plaza de Armas de la capital regional ha sido escenario y plataforma constante de ferias durante el año. Sin embargo, en la previa a Navidad, la feria se diversificó, sosteniendo a distintas agrupaciones, con diversas infraestructuras de colores, que ha llamado la atención durante estos días; y sobre todo, con una diversificación de ofertas de todo tipo.
En estos momentos, en la Plaza de Armas se ubica la feria de las agrupaciones dependientes de SerenActiva, una feria privada que se inició como Feria Navideña, una Feria de Artesanía en metal, madera y mosaicos; y finalmente una Feria de Colonias Extranjeras.
En la ex Feria Navideña y la de extranjeros, priman productos de reventa.
Algunos artesanos y emprendedores que en el mismo puesto fabrican o elaboran sus productos están disconformes con que se le entreguen espacios a los revendedores, puesto que lo consideran injusto.
Nancy Opazo, artesana de La Serena desde hace 10 años y desde hace 4 con SerenActiva, siempre ha realizado los tradicionales cubrebotellas con diseño de vestuario de fraile, que identifican a distintos equipos de fútbol, además de trabajos a crochet.
Para ella, «resulta distinto si fueran artesanos como nosotros, porque nosotros hacemos nuestros productos con nuestras manos, pero aquí llegan muchos revendedores, que compran y revenden. Entonces, deberían dar la prioridad a las personas que hacemos los productos, que somos netamente artesanos», comenta Nancy.
Además, agrega que «sobre las personas que vienen de afuera no nos gusta mucho porque les quitan la oportunidad a la misma gente de la zona, que quedan sin puesto por gente que viene de afuera, y en esta temporada siempre llega gente de todos lados (…) por ejemplo le dan la oportunidad a los peruanos, a los ecuatorianos, que es pura gente con productos chinos».
Para Juan Vásquez, otro artesano de La Serena, quien trabaja con diversos materiales, señaló que «para mí, todo el que sea artesano tiene la puerta abierta, porque de hecho, yo soy artesano toda una vida, más de 30 años, y nunca he comprado productos para revender y si vienen otros artesanos ya sean de Illapel, Combarbalá, de donde sean, y si viven durante todo el año de artesanías, yo no tengo ningún problema que expongan, a lo que me opongo a la reventa de artesanía, de una pseudo artesanía peruana, china, a eso sí que me opongo».