Con una planta piloto que utiliza tecnología japonesa para tratar y recuperar aguas residuales trabajan expertos de la Universidad Católica del Norte (UCN) durante los últimos dos años, apoyados por el Gobierno Regional de Coquimbo.
Los resultados son auspiciosos, ya que la planta implementada en dependencias de Aguas del Valle se presenta como una solución tecnológica viable, de bajo costo, menor consumo energético y amigable con el medio ambiente.
Los académicos gestores de la iniciativa, proyectan la tecnología como una opción para reemplazar o complementar las plantas tradicionales de tratamiento, los Sistemas de Agua Potable Rural (APR), o para tratar las aguas residuales de la industria vitivinícola o de productos del mar.
En Japón es una opción que se comenzó a trabajar con éxito hace al menos 10 años.
El director del proyecto, Joel Barraza, manifestó que «los resultados han sido sorprendentes en cuanto a la proyección que se hizo en el momento del diseño, participaron ingenieros de Japón, se trazaron curvas de desempeño del proyecto y esas fueron sobrepasadas con creces. Es una tecnología que tiene un potencial enorme para la región y el país, y es tan innovadora, que no existe literatura al respecto».
El Dr. Juan Illanes, investigador y parte del equipo del proyecto, manifestó que la tecnología probada a través del pilotaje es relativamente reciente y ha sido destacada por la United Nations Industrial Development Organization (UNIDO), junto a otras dos alternativas creadas en Japón, como «Green Industries».
En Chile, destaca el investigador, esta es la primera experiencia y la Región de Coquimbo es pionera, «por primera vez esta tecnología ha sido probada fuera de Japón, en un área aún no explorada como es el tratamiento de aguas domésticas urbanas».
Este sistema de depuración, llamado Intelligent Pass (IP), según los investigadores, crea un nuevo paradigma en la capacidad de drenajes, por la reducción en la producción de lodos y olores que actualmente presentan los sistemas tradicionales, es fácil de operar y no requiere de una mayor mantención, lo que en términos económicos resulta muy atractivo y beneficioso.