Fue el mismo propietario del inmueble que abrió la puerta, luego que el delincuente que usaba la chaqueta muy similar a la de un efectivo de la PDI, le pidió entrar para, supuestamente, entrevistarlo y hacer una revisión.
Apenas la víctima abrió el falso policía entró junto a cuatro cómplices los que lo redujeron a golpes junto a su progenitora, ingresando a las habitaciones desde las que sacaron cámaras fotográficas, equipos de topografía, y celulares, botín que lo sujetos cargaron en un automóvil de color rojo, en el que huyeron.
Guillermo Namor, Subprefecto jefe de la Brigada Investigadora de Robos, Biro, de la PDI, que indaga el caso, adelantó que hay importante antecedentes que permitieron identificar y dar con el paradero de los integrantes de la banda, diligencias que incluyen el rastreo en ferias libres de la zona, en caso de que individuos ofrezcan allí alguna de las especies robadas, «se están tratando de realizar retratos descriptivos con las víctimas, ya que dos de los delincuentes actuaron sin cubrir sus rostros»
Además el Subprefecto, confirmó que los moradores de la vivienda resultaron con lesiones leves, «las víctimas fueron trasladadas al recinto asistencial para constatar sus lesiones, siendo dados de alta».
Por otra parte el jefe policial, reiteró los consejos a la comunidad, para que puedan identificar fehacientemente a los verdaderos funcionarios de la PDI, «los detectives deben identificarse y explicar la razón por la que se presentan ante una persona. Ellos tienen una portaplaca de cuero color burdeo, que contiene la placa institucional con un número de serie tallado bajo el escudo nacional y además cuentan con una identificación policial con fotografía, cargo, apellidos, nombres, número de cédula de identidad y número que coincide con el número de serie de la placa».