P.M.B, de 37 años, luego de consumir licor, perdió el control del volante del todoterreno que guiaba por avenida Costanera de Coquimbo, por lo que el móvil salió del carril para terminar chocando con dependencias de una sala del Casino de Juego de Peñuelas a las 19:00 del domingo.
Instantes después, el conductor recibió ayuda de un pariente para informar a la policía que le todoterreno les había sido robado horas antes, versión que fue descreditada, de acuerdo al Subprefecto, Guillermo Namor, jefe de la Brigada Investigadora de Robos, Biro de la PDI, por las evidencias reunidas por los indagadores de la unidad, los que en primera instancia empezaron a investigar el incidente como un hecho delictual tipo “alunizaje”.
“Se determinó que el delito no correspondería a robo de vehículos, si no a daños, ya que el conductor se encontraba bajo los efectos del alcohol, por lo que una vez cometido el hecho, abordo un automóvil de su hermano y posteriormente realizaron una denuncia por robo”,
P.M.B, reconoció los hechos a los detectives a los que señaló que su hermano, había mentido, para protegerlo.
Por otra parte los exámenes practicados al imputado que fue puesto a disposición del Juzgado de Coquimbo, señalan que guiaba el todoterreno con 1,04 grados de alcohol por litro de sangre.