Es una tradición de años. Llega marzo y es común ver por las calles a estudiantes de diversas casas de estudios con la ropa destrozada y sucia producto del clásico «mechoneo», una vez que se les da la bienvenida al mundo universitario y cuyo proceso suele ser muchas veces coronado en un contexto de bromas y esparcimiento, pero también en un violento «maltrato» de los novatos frente a sus futuros compañeros.
Y es ese «maltrato» el que quieren erradicar desde ya. Al menos así lo evidenciaron desde la Universidad de La Serena, donde la semana pasada comenzaron una campaña a través de las redes sociales #NoHayManoPalMechoneo y que esperan, con el correr del tiempo, se pueda eliminar, dado que esta práctica a muchos ya les incomoda.
«El objetivo es hacer un llamado de atención a toda la comunidad estudiantil de la Universidad de La Serena, pero no sólo quedarnos centrados en nuestra ciudad y región, sino que también poder hacer un llamado a todas las casas de estudios a nivel nacional para que de ese modo se pueda resguardar y proteger la integridad de los alumnos. Vemos como cada año se justifica mediante el enunciado ‘ahora me toca a mí’, ‘que es para el mismo carrete de los niños’, pero la verdad es que nosotros consideramos que esas razones son injustificadas desde su misma base, porque creemos que esas justificaciones, valga la redundancia, están ligadas más bien a una violencia que ya es simbólica. No es una agresión física, sino que es una violencia que igual se ejerce de manera justificada a través de una tradición y bienvenida», cuenta Paulo San Paris, alumno de tercer año de odontología de la ULS y secretario de bienestar estudiantil y cultura.
Durante años y en medio del jolgorio juvenil, quienes osaban no participar del proceso eran tachados como «amargados» o «fomes». Y eso, claro está, es lo que quieren que ocurra más. Acá y en todas partes. Por lo mismo, explica San Paris que «existe una línea transversal a todas las federaciones de la Universidad de La Serena a no seguir con esta tradición, a no seguir con esta imposición de violencia y que vaya gradualmente en escala. No podemos estar violentando y justificando un acto contra nuestros propios compañeros por un fin que es hacer un carrete o una fiesta de bienvenida».
Y agrega que «si bien es cierto que no podemos hacernos cargos de todas las personas que hoy andan por las calles pidiendo como suele pasar en estas fechas, si sabemos que hay carreras de la ULS que de igual manera mantuvieron estos hechos de mechonear, pero también sabemos que hay muchas otras carreras que se abstuvieron a nuestro llamado y que efectivamente no hicieron este «mechoneo». Esas carreras optaron por otras actividades, como la tradicional fogata que hace Arquitectura en la playa. También otras carreras decidieron hacer churrascas en el Parque Coll y así darles una bienvenida más grata a los compañeros, lo que se agradece».