Ni qué chupacabras ni nada… son perros y actúan a plena luz del día. Muerden los neumáticos de vehículos hasta romperlos y los abandonan cuando están seguros que no les queda aire.
Ocurrió ayer en el centro de Coquimbo donde a lo menos cinco vehículos, todos autos, fueron «víctimas» de este ataque de un perro blanco, grandote, que se ensañó con los neumáticos.
Los dueños de los autos no lo podían creer. «Esto es terrorismo», fue lo primero dijo una vecina que iba pasando, mientras la dueña miraba sin encontrar poder convencerse de lo que veía, Uno de los neumáticos de su auto, estaba destruido, irrecuperable. ( 40 mil).
Lo mismo ocurrió con un caballero que trabaja de Uber. «Esto parece pesadilla. Si no lo hubiera visto, no lo creería, ¿A quién le reclamo?.. ¿a la municipalidad?… No sé que hacer, esta es mi herramienta de trabajo y esos son perros de la calle, nadie se hace cargo de ellos.
Y así, en los demás casos fue similar. La gente miraba atónita al perro blanco que nadie sabe de donde salió que, desde la otra esquina miraba su obra…
