Conocido el caso de Mauricio Tapia, de 26 años, vecino de Coquimbo que padece esquizofrenia y que también presenta adicción a las drogas, el cual, en las últimas semanas, ha realizado actos de acoso y agresión hacia mujeres en el sector de avenida Costanera, ayer, con apoyo de Carabineros, fue ubicado en al Parte Alta, por funcionarios municipales por instrucción expresa del alcalde Marcelo Pereira, que getionará la internación del joven en una clínica siquiátrica de la capital.
Después de ser ubicado Tapia, fue remitido al Consultorio Santa Cecilia donde fue atendido por los médicos que lo derivaron a la unidad de siquiatría hospital San Pablo.
En ese recinto el paciente, quedo internado de forma provisoria, mientras que la casa consistorial, solicita un cupo en una clínica siquiátrica de Santiago, para que sea tratado con asignación de fondos propios.
El alcalde, indicó que ya tomó contacto con la hermana del joven para entregarle tranquilidad, explicando que su accionar solo obedecía a su grave condición mental no tratada.
«Conversé con Nevenka, que está tremendamente afectada y lo está pasando mal. Yo quiero decirle a la comunidad que Mauricio es una persona que está enferma, que tiene una patología psiquiátrica llamada esquizofrenia y consumo y abuso de pasta base.
ntonces, comprenderán que las acciones que haga en la calles, están dentro de una persona que tiene este tipo de patologías».
Primeras gestiones
El miércoles el alcalde Marcelo Pereira, indicó que como primeras gestiones del caso que iba a solicitar a la autoridad de salud regional, brindar un tratamiento al poblador en un centro de salud mental.
«Junto al concejal Fernando Viveros, conversamos esta situación ya que como médicos, sabemos que el problema de esta persona no solo es por consumo de drogas ya que tiene una patología base por lo tanto el municipio va a tomar acciones para ayudarlo a él y a su familia, es así que nuestro Departamento de Salud va a enviar una carta al Servicio de Salud Coquimbo, para que esta persona sea internada en algún establecimiento siquiátrico para que tenga el tratamiento que necesite».
Pereira, también lamentó la situación de Tapia, recordando que, a nivel país, falta mucho por avanzar en cuanto a asegurar los tratamiento adecuados a personas con problemas mentales de escasos recursos.
«Cuando alguien tiene una enfermedad de base siquiátrica, que se ve aumentada con un consumo de drogas o alcohol, hace que esos pacientes tengan este tipo de comportamientos antisociales graves, lo que afecta a los demás y en eso, el estado, está al debe, para dar mejor atención a las personas que no tiene recursos para costearse un tratamiento»
