Pese al resultado negativo, respecto al mismo mes del año anterior, el Imacec estuvo por sobre lo esperado, ya que los expertos habían anticipado una caída del 4 por ciento para ese mes.
Pablo Pinto, director de la Escuela de Ciencias Empresariales de UCN, al respecto comentó que «muestra el índice de actividad mensual de todos los sectores en Chile que producen bienes y servicios decreció, en otras palabras, que producto de la crisis social, las empresas que tuvieron que generar bienes y servicios disminuyó respecto de lo que había sido el año anterior, nos volvimos menos productivos».
Pinto explicó que uno de los efectos de tener un decrecimiento es que puede incidir en la cifra de desempleo, que contra todos los pronósticos en la región fue la más baja desde el 2012, pero incluso podría demorarse unos dos o tres meses en que se vea efectivamente reflejada, «recién en el indicador de diciembre o enero se podrían dimensionar los efectos de la crisis».
«Hay que ver dos análisis, porque el Imacec se mide a nivel nacional y la cifra del desempleo se mantuvieron en el rango que estaban esperadas, en el orden de 6,9%», sostuvo.
Respecto a las causas, «se produce en condiciones que el Imacec disminuye, puede ser por un elemento de rezago, las empresas producen menos ahora pero no necesariamente han despedido a los trabajadores en función a esa nueva producción, en algunos casos los han mantenido, y segundo, las cifras que entrega el INE del desempleo son trimestrales que incluye septiembre, octubre y noviembre, por tanto, todavía no vemos el efecto global».
«Si estas cifras del Imacec se mantienen en diciembre, de uno negativo, quiere decir que como país no estamos creciendo en cuanto al potencial que debería, se estimaba que Chile iba a crecer en una tasa que bordeaba el 2,5 y el 3,5 por ciento anual y en las condiciones actuales, va a indicar que el país va a terminar creciendo 1 punto», señaló.
Para el economista, «existe todavía opción que el desempleo pueda aumentar y para que eso no ocurra depende de cómo se comporte la actividad de verano, en la región una de las causas del por qué el desempleo se mantuvo bajo fue por dos sectores, la minería, que tuvo un repunte significado con proyectos nuevos, como Arqueros, que está en fase de construcción, y el otro sector fue la industria manufacturera».
Economía de menos a más
En conversación con el seremi de Economía, Carlos Lillo, explicó que «el Imacec del mes de noviembre de 2019 anotó una caída de un 3,3%, donde el Imacec minero cayó en 5,1% y el no minero lo hizo en 3,1%, este último debido al desempeño de las actividades de comercio y servicios».
«Si bien las cifras están por sobre las pronosticadas por diferentes analistas, no deja de ser una caída importante en nuestra actividad económica, lo cual sumado a las proyecciones del Imacec de diciembre cerraríamos el año 2019 con un 1% de crecimiento», agregó.
El seremi enfatizó en que «el año 2020 nuestra economía ira de menos a más, producto de las consecuencias del estallido social ocurrido desde el 18 de octubre del 2019, donde el desempleo y la caída en las inversiones representarán el gran desafío para nuestra economía. Cobrarán mucha importancia las variables internas más que externas, siendo los acuerdos políticos claves en nuestro crecimiento económico. A nivel regional estamos trabajando y potenciando a las micros, pequeñas y medianas empresas principalmente del rubro de comercio y turismo».
Expertos afirman que cifras del Imacec
y desempleo demuestran estabilidad
Los académicos de la Usach Víctor Salas y Gonzalo Martner consideran que las caídas no son “catastróficas”, lo que demuestra el grado de desarrollo del sistema económico nacional. “No es justo que se atribuya a los hechos sociales de octubre y noviembre un deterioro que venía de antes”, critica este último.
Una caída de 3,3% anotó el Índice Mensual de Actividad Económica en el mes de noviembre. La cifra informada por el Banco Central es mejor de lo que se esperaba, ya que el mercado anticipaba una baja de 3,5%.
Para el economista y académico de la Facultad de Administración y Economía (FAE) de la Universidad de Santiago, Víctor Salas, la situación “demuestra el estado de desarrollo económico como país. Los comportamientos se mantienen estables. No crecemos demasiado ni tampoco caemos tan drásticamente”, sostiene.
El también economista y académico de la FAE de la Usach, Gonzalo Martner, concuerda en que el efecto del estallido social no será tan “catastrófico” como se prevé. “Esta economía demuestra capacidad de adaptación”, enfatiza.