No es un pacto electoral, quizás algunos de los partidos que se unieron ahora no tengan una proyección conjunta después del 26 de abril, pero los une que todos están a favor de aprobar una nueva Constitución y mediante una convención constitucional.
Este viernes, representantes de los partidos Democracia Cristiana, PPD, Socialista, Radical, Comunes, Revolución Democrática y Convergencia Social, dieron a conocer que se unieron en un nuevo pacto social con el objetivo común que es buscar el triunfo de la opción de crear una nueva Constitución.
Cristóbal Reyes, presidente regional de Revolución Democrática, hizo ver que «hemos logrado acuerdo respecto de las acciones para lograr la mayor cantidad de participación y votos a favor del apruebo.
Aclara que no es un comando único ni un pacto electoral, ni tampoco una alianza política. «Es únicamente una coordinación territorial para poder abarcar la mayor cantidad de espacio posible».
Consultado por el PC, explica que si bien participaron en una primera reunión, posteriormente se restaron, «no quisieron participar y están en todo su derecho».
Patricio Solís, primer vicepresidente regional de la Democracia Cristiana, señala que esta es una coordinación que han tomado todos los partidos de oposición, con el objeto de tener una voz clara y mensaje a toda la comunidad de lo que será el plebiscito, y en ese sentido no tenemos una voz distinta con lo que queremos como resultado».
«Partimos de diagnósticos distintos, pero tenemos claro que el primer paso es partir con una nueva Constitución, y para eso, en el plebiscito del 26 de abril, es fundamental que gane la opción del apruebo».
Claudia Pilar, presidenta regional de Convergencia Social señala que la idea de hacer esta coordinación es poder aunar fuerzas, «porque nos dimos cuenta que cada uno por su línea o por su campaña no es suficiente y tenemos que unirnos como oposición para que la opción del apruebo y la convención constitucional ganen, apostamos a eso».
«Como Frente Amplio siempre hemos estado coordinados, pero con el resto de los partidos de la oposición no habíamos tenido instancias de conversar, porque el clima social y político no estaba muy apto, y cuando lo hicimos nos dimos cuenta que teníamos que unirnos o nos iban a pasar por encima», agrega.
Alejandra Díaz, presidenta regional del PPD: «Se trata de que más amplio sea, mejor. Para el Partido por la Democracia es importante esto que es la unidad, entendemos que en el proceso que estamos viviendo, el lograr que la ciudadanía apruebe una nueva Constitución, que sea además una convención constitucional donde el cien por ciento de los miembros sean electos por ellos mismos, es importante, pero para lograrlo era necesario este comando unitario».
Jocelyn Burgos, presidenta regional del Partido Comunes, explica que «necesitamos no solo que se apruebe, sino que también tenga una legitimidad. Nosotros sabemos que la Constitución de Pinochet fue ilegítima por las condiciones en que se dio, por lo tanto no podemos permitirnos repetir eso».
Clara Olivares, presidenta regional del Partido Socialista: Esta reunión marca un hito en la región con la presencia de los presidentes de los partidos de la oposición. «Alberga los sueños y esperanzas que tiene la gente y que tiene que nacer después de todo este proceso que ha sido doloroso».
Consultada si podría converger en un pacto electoral, Olivares enfatiza en que por ahora no, «no es algo que hayamos conversado ni el tema que nos juntó, nuestro único objetivo es que el 26 de abril gane la opción de aprobar una nueva Constitución».
Raúl Godoy, presidente regional del Partido Radical: «Es importante que aquí al menos siete partidos de oposición nos hayamos reunido para hacer una declaración conjunta, en donde hemos dicho que vamos a trabajar con un objetivo común… para el 26 de abril marcar apruebo y en el segundo voto por la convención constitucional», señala.
Y agrega «cada partido o sector trabajará en forma separada, pero siempre coordinados para lograr el mismo objetivo, y los radicales con más de 150 años de historia siempre hemos estado por defender a la clase trabajadora».
