Arrepentido, y con un abogado. Así llegó Ignacio Castillo Montenegro, de 24 años de edad y con un abultado prontuario, el presunto femicida de la joven madre Yulissa Cerda, al cuartel de la PDI de calle Anfión Muñoz, quien era intensamente buscado por la policía civil.
En palabras del propio jefe de la Brigada de Homicidios de La Serena, el comisario Claudio Alarcón, «detectives realizaron diversas diligencias para la búsqueda del imputado, y el jueves en horas de la mañana éste se presentó en forma voluntaria acompañado por su abogado defensor en dependencias de la Brigada de Homicidios, donde finalmente fue detenido».
Castillo Montenegro fue sacado del cuartel de la PDI bajo la mirada de varias personas, quienes lo reprocharon y lo trataron de asesino.
Cabe recordar que la noche del pasado lunes ocurrió el femicidio de una mujer de 22 años identificada como Yulissa Belén Cerda Aguilera. Según antecedentes entregados por la PDI, Castillo Montenegro se dirigió hasta el domicilio de la víctima, ubicado en el sector de Las Compañías, en la comuna de La Serena, donde se habría producido una discusión que desencadenó el delito.
Vecinos del lugar habrían escuchado un disparo, y al percatarse de que la mujer se encontraba herida la trasladaron hasta un centro asistencial, posteriormente fue trasladada hasta el hospital de La Serena, donde falleció, siendo su causa probable de muerte herida torácica por arma de fuego.
Imputado en prisión
preventiva y 120 días
de investigación
En el Juzgado de Garantía de La Serena, y vía online, la Fiscalía local formalizó al imputado, quien es investigado por su presunta responsabilidad en la muerte de Yulissa Cerda, en el sector de Las Compañías.
La Fiscalía comunicó los cargos a investigar, los cuales indican, hasta ahora, que el femicidio ocurrió al interior de la casa habitación en que estaba la víctima, a la cual había llegado el sujeto.
El fiscal Rodrigo Céspedes relata que «luego de la ocurrencia de los mismos hechos, que suceden en el domicilio de víctima e imputado, quienes eran convivientes, se desplaza la víctima hacia un consultorio con ayuda del imputado y los vecinos, y luego de eso el sujeto abandona a la víctima y la deja con un vecino, que es testigo, quien consigue las primeras atenciones médicas. Por la gravedad de las lesiones, es derivada hasta urgencia del hospital de La Serena, pero por la gravedad de las mismas terminó fallecida».
El sujeto quedó en prisión preventiva, luego de la petición de la Fiscalía. La justificación de la cautelar, según dijo el fiscal, «es que el tribunal dio por acreditado la existencia del delito, la causa la muerte con un arma de fuego, ya que le disparó en dos oportunidades, uno de ellos letal, y presunciones fundadas de su participación, principalmente por declaraciones de los vecinos que lo sitúan en el sitio del suceso, en forma inmediata».
Céspedes añade que la pena asignada al delito, que incluso puede llegar al presidio perpetuo calificado, y circunstancias agravantes en contexto de VIF, como el hecho que el sujeto cumplía una pena sustitutiva de robo en lugar habitado del año 2019, también implicaron la justificación de la medida de prisión preventiva.
El juzgado concedió un plazo de 120 días para el desarrollo de la investigación, en el cual incluso podría configurarse otro ilícito, si se llegara a establecer si el sujeto tenía o no permiso para portar armas.
Hasta 40 años en la cárcel
El presidio perpetuo es la máxima sanción que contempla el código penal en el país, y en el caso del presido perpetuo calificado el condenado no podrá optar a beneficios, como una posible rebaja de condena, hasta cumplir los 40 años en la cárcel efectivos.
En el caso puntual cuando se comete un femicidio, el hombre que mata a una mujer que es o ha sido su cónyuge o conviviente, o con quien tiene o ha tenido un hijo en común. En estos casos la pena es de presidio mayor en su grado máximo a presidio perpetuo calificado, la misma pena del parricidio.