El llamado de un particular alertando sobre la presencia de una lechuza blanca que había sido recogida a orillas de la carretera cercana a la localidad de Guanaqueros, movilizó a los inspectores del SAG, constantando que efectivamente se trataba de un ejemplar de la especie Tyto alba tuidara, conocida comúnmente como lechuza.
No evidenciaba signos de un cuadro respiratorio (epífora, presencia de secreción nasal), alteración de plumaje, ni alteraciones musco esqueléticas determinándose su liberación horas más tarde en un sector cercano a Lagunillas.
Diego Lastarria, Director Regional del SAG agradeció el importante rol que cumple la ciudadanía en la denuncia oportuna de situaciones de maltrato o cautiverio de fauna presente en nuestra región.
«Valoramos este tipo de conductas que demuestran un fuerte compromiso por parte de la comunidad que permanentemente participa y contribuye con la preservación de nuestra fauna nativa, entregando a las especies una segunda oportunidad para recuperarse y volver a su hábitat», recalcó la autoridad.