El presidente de la Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur), Ricardo Margulis, llamó a las autoridades a “redoblar esfuerzos” para acabar con actos de violencia como los que se vivieron el domingo en varios puntos del país, advirtiendo que podría afectar la reactivación del turismo.
“Llevamos un año corrido inmersos en una crisis sin precedentes para nuestro sector, que se inició precisamente con la violencia desatada que se registró a partir del 18 de octubre del año pasado, que se profundizó con la pandemia, y que ahora parece no terminar con la prolongación de acciones vandálicas, que de continuar hará inviable la urgente y necesaria reactivación de nuestro sector”, detalló.
Es por eso que solicitó acabar con “la violencia irracional que destruye hoteles, restaurantes, comercio y bienes públicos y privados, pero que además daña de forma grave la imagen país”.
“Compartimos el sentir del alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, en cuanto a que es primordial que el Estado enfrente de manera decidida esta violencia sin sentido, con todas las herramientas que le entrega la ley para hacerlo, ya que de otra forma, será muy difícil reactivar la economía, que ha estado fuertemente dañada por esta violencia y por la pandemia”, remarcó.
“No basta con condenar estos hechos, anunciar querellas y que se perseguirá a los responsables, porque llevamos un año en lo mismo, y esas intenciones no se han traducido en acciones concretas que detengan el actuar de los violentistas”, enfatizó.
El temor de la industria del turismo, puntualizó el presidente de Fedetur, “es que nos hemos preparado durante meses para la reapertura del turismo, luego de estar siete meses cerrados, con el anhelo de poder comenzar nuestra recuperación pronto, pero esos esfuerzos serán en vano si es que se mantiene la violencia callejera”.
“Necesitamos volver a funcionar, necesitamos levantarnos de esta tremenda crisis y comenzar luego a recuperar los 300 mil empleos (50% del total) que ha perdido el sector turismo, y para eso es fundamental que esté garantizada la seguridad pública, cuestión que hasta ahora no ocurre”, complementó.
Margulis completó que “estamos a la espera de que el gobierno autorice la apertura de las fronteras para volver a recibir a los turistas extranjeros, pero si se mantiene el actual escenario de violencia, nadie va a querer venir a Chile, y eso sería el golpe de gracia para la actividad turística”.