Ante el comité político del gobierno, luego con el Contralor Nacional, y con los ministerios de Hacienda y del Interior en el palacio de gobierno, el alcalde
Alí Manoucheheri expuso con detalles la deuda municipal, esperando
luces para salir a flote.
El alcalde, que estará hasta el jueves en estas diligencias, viaja con siete concejales, prensa y funcionarios.
Manouchehri ha dicho que la deuda del Coquimbo supera los $ 32 mil millones.
En uno de los concejos municipales celebrados hace un par de semanas, el abogado del organismo fue enfático en destacar que sólo queda plata hasta este mes (julio).
«Hoy día vinimos a dejar un carta al Presidente de la República, para exponerle la grave crisis financiera por la que está pasando nuestro municipio. En estos momentos la situación no puede ser más crítica y necesitamos tomar medidas y recibir el apoyo también del Estado. Esta crisis nos ha golpeado duro, tenemos también deudas gigantescas por concepto de recolección de basura, también en electricidad y un sinfín de deudas con acreedores. Esperamos revertir esta situación, y eso es lo que estamos haciendo», dijo el alcalde.
La ejecución presupuestaria del año 2021 en la cuenta relativa a Gastos en Personal, equivale a un 90% aproximadamente, es decir, no quedan recursos para afrontar las obligaciones con los trabajadores del municipio. No obstante, para hacer frente a esta crisis, por parte de la administración se ha elaborado un plan de austeridad, que ya ha empezado a correr con medidas como la cancelación de la Pampilla 2021 y el cese del cargo de asistente de concejal. Por eso se busca la solicitud de un leaseback y el retorno de los ingresos del Casino.
En ese contexto, el concejal del PC Nelson Martínez señaló que «nos parece importante dar una señal de unidad ante esta situación tan crítica en que recibimos el municipio. Comprendemos el problema en que está Coquimbo, por eso hemos solidarizado con el alcalde y apoyado en todas las gestiones que podamos hacer con el gobierno central».
En tanto, la independiente Sonia Elgueda también valoró el viaje. «Sin duda es un hecho muy emblemático que concejales de diversas líneas políticas estemos unidos, porque de verdad este desfalco es histórico, histórico en Coquimbo y en los municipios. Así que estamos acá, acompañando al alcalde en esta gestión para mejorar lo que es esta crisis económica y esperemos nos dé buenos resultados».
Los estados financieros que consigna la nueva administración dan cuenta que la deuda vencida y actualmente exigible al día 30 de junio ascendería a la suma de $ 32.288.947.000, proyectando para el 31 de diciembre una suma superior a los $ 40 mil millones. Dicho endeudamiento, entre otros conceptos, incluye $ 13.000 millones en recolección de residuos sólidos (basura); $ 8.000 millones en alumbrado público y electricidad; deudas a proveedores locales, laboratorios y honorarios a trabajadores municipales desde el mes de mayo a la fecha.
