El representante de Apruebo Dignidad, pacto que agrupa al Frente Amplio y al Partido Comunista, Gabriel Boric, estuvo en Punta de Choros, en la comuna de La Higuera, para reunirse con pescadores y vecinos que están en contra del proyecto minero-portuario Dominga, en donde firmó un compromiso con los habitantes del sector, «es distinto cuando se hacen declaraciones desde Santiago, cuando no se mira a los ojos».
Luego de la aprobación del proyecto minero portuario Dominga, de Andes Iron, el miércoles pasado, diversas agrupaciones ambientalistas se han manifestado en rechazo a la iniciativa que pretende extraer hierro y cobre en el sector de La Higuera. Hecho que causado revuelo no solo a nivel regional sino que nacionalmente.
En este sentido, Gabriel Boric, candidato presidencial de Apruebo Dignidad, comentó que «para nosotros es tremendamente importante que una candidatura presidencial esté en terreno, que haga su pega desde los territorios, conversando con quienes se ven afectados por las decisiones que muchas veces se toman a nivel central», señala.
Agrega que «la decisión de la semana pasada de autorizar Dominga, después de dos rechazos, llevada adelante por el gobierno de Sebastián Piñera, causa un daño tremendo y nos pone en tela de juicio no solamente ante las comunidades sino que ante la humanidad. Tenemos un desafío al cual no podemos seguir haciendo oídos sordos o taparnos los ojos porque algunos no quieren ver, que es un modelo de desarrollo que sea sustentable y sostenible con el medio ambiente, que entregue trabajos dignos, que además reparta las riquezas entre quienes la generan, que son los trabajadores, y no seguir con un modelo extractivista de destrucción socio ambiental y de acumulación de riqueza de unos pocos».
Puntualiza en que «estamos en Punta de Choros para decir no a Dominga, sí al desarrollo, uno distinto al que está proponiendo este gobierno de Piñera y su continuador, Sebastián Sichel, y me gustaría emplazarlo a que tome postura de estos temas que afectan a las comunidades, porque estamos en tela de juicio como país ante un desafío que nos excede como personas individuales, que es la protección del planeta en que vivimos».
«Queremos defender la biodiversidad, las fuentes de agua, un trabajo que sea digno para todos quienes lo necesitan, y no seguir con esta lógica de proyectos que terminan dividiendo a las comunidades», añade.
«No puede ser que empresas como Andes Iron vengan con promesas de corto plazo y terminen dividiendo a las comunidades producto de las necesidades no cubiertas por un Estado que ha estado ausente, lo vimos anteriormente en Caimanes con Minera Los Pelambres, y en otras comunidades donde las empresas terminan reemplazando al Estado por falta de iniciativas».