Yohan Tirado recibió un tiro en la zona facial, presuntamente disparado por sujetos que tuvieron un fuerte altercado con integrantes de su familia en Tongoy. Corre el riesgo de perder un ojo.
Habitantes de la zona se manifestaron con barricadas debido a una serie de denuncias anteriores contra los que serían autores del delito de homicidio frustrado.
Estable, aunque en riesgo vital, permanece el joven de 22 años, padre de dos niños, egresado del Liceo Carmen Aurora Rodríguez Henríquez de Tongoy. Según los antecedentes recabados por Diario La Región, Yohan recibió un disparo en el rostro de un arma tipo escopeta hechiza.
El muchacho, que al igual que el resto de su familia se dedica a la venta de mariscos, resultó gravemente herido por un impacto que le dejó su cara completamente hinchada con perdigones que lamentablemente mantienen comprometido uno de sus ojos.
De hecho, fuentes al interior del hospital San Pablo señalaron que los médicos trataron con mucha cautela la situación, pues la zona del cerebro no estaba en condiciones de ser intervenida y además tendría incrustación de perdigones en el cerebro y en un nervio, el cual fue directamente tocado.
Según informaron medios locales, el joven habría sorprendido a unos sujetos intentando robar el vehículo de la familia, estacionado en el frontis de su vivienda. En ese contexto Yohan habría salido a frenar el hecho, recibiendo el disparo en la cara.
Sin embargo, este medio llegó hasta el conocido balneario de la comuna puerto, donde se pudo recoger con vecinos distintas versiones de lo acontecido. Así se daba cuenta de que horas antes al escopetazo, parte de la familia de Yohan (hermanos menores) habrían sostenido una dura pelea con otros jóvenes de Tongoy, riña en la cual incluso habría participado uno de los padres de los involucrados.
En esa línea, estas personas habrían tomado venganza dirigiéndose hasta el domicilio de Yohan. Testigos aseguran que el afectado recibió el disparo solo por haber sido el primero en salir de la puerta de la casa, ya que la riña no era supuestamente con él. Tras cartón los tipos emprendieron la fuga.
El Fiscal de turno dispuso la concurrencia de personal de la Sección de Investigaciones Policiales (SIP) de Coquimbo y de la Unidad Especializada del Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Laborcar).
La información hasta acá haría referencia que los posibles autores del hecho estarían identificados,
Durante la tarde de este lunes, familiares del afectado llegaron hasta Coquimbo para ver el avance del estado de salud del joven.
«La familia está destrozada, sus padres, sus hermanos, su abuela, no han parado de llorar. Ellos son de esfuerzo, una familia tongoyina trabajadora. Fue muy grave lo que sucedió debido a cómo quedó Yohan, hay cadenas de oraciones pidiendo su pronta recuperación».
El delegado municipal de Tongoy, Gonzalo Pardo Araya, catalogó el hecho como un caso grave pero aislado, asegurando que prestarán como organismo toda la ayuda necesaria a la familia. La autoridad tongoyina fue profesor de Yohan en el Liceo, esbozando cualidades positivas del joven.
Durante la noche del domingo los vecinos salieron a la calle a manifestar su descontento por lo sucedido a plena luz del día y en pleno verano. Tongoy se llena de turistas y de hechos de sangre que, dicen, no quieren se vuelvan a repetir.
La protesta consideró barricadas y cortes de ruta hasta altas horas de la madrugada. Así es como un grupo de 70 personas, entre adultos y jóvenes, se reunieron de manera pacífica para protestar cortando los ingresos con barricadas para evitar el tránsito de vehículos.
«La idea es protestar por la falta de seguridad que está afectando hoy al balneario y se espera alguna respuesta por parte de las autoridades», dijo una participante de la jornada.
Yohan, al cierre de esta edición, estaba en riesgo vital en la UCI del Hospital San Pablo de Coquimbo, donde le habrían inducido un coma y un tratamiento con antibióticos para evitar la infección de los perdigones que se incrustaron en su cerebro y afectado uno de sus ojos.
