A mediados del 2021, y tras una fuerte presión ciudadana, fue
anunciado con bombos y platillos que el municipio de La Serena,
el movimiento Salvemos El Bosque y la inmobiliaria Habita,
quienes están desarrollando un proyecto habitacional en el sector de La Florida, crearían una mesa de trabajo junto con distintas
acciones para preservar el pulmón verde, pero a la fecha no
ha habido avances, incluso dieron a conocer que los trabajos
están solo a 20 metros de los eucaliptos.
Todo comenzó en abril del 2021, cuando a través de redes sociales empezó a circular un video en donde se veía a una vecina de La Serena, quien habitualmente salía a recorrer los senderos del bosque de eucaliptus de La Florida, en los faldeos del Cerro Grande, cuando un día se encontró con un cierre perimetral y maquinarias trabajando en el sector, para la construcción de un proyecto inmobiliario que contempla un total de 1.122 unidades habitacionales, entre 682 viviendas y 440 departamentos, de la inmobiliaria Habita.
Este hecho originó un importante movimiento ciudadano que pretendía preservar el pulmón verde de La Serena, que dio paso a una mesa de trabajo entre el municipio, el movimiento Salvemos el Bosque y la empresa inmobiliaria.
En ese contexto, Juan Carlos Conejeros, secretario de la Corporación Ambiental Paz Sustentable, que sería la evolución de la agrupación Salvemos el Bosque, sostiene que «se crearon unas mesas donde se iban a trabajar varias cosas, primero la inmobiliaria debía hacer mitigaciones por una serie de cosas que involucra el proyecto, como movimiento de tierra y todo lo que impacta en el ecosistema, y una de ellas era implementar alguna infraestructura de eficiencia energética en los vecinos mediatos, que son los del sector de La Florida».
«Junto con Rodrigo Muñoz nos hicimos cargo de la mesa de la huella de carbón, para poder medir este impacto en el proyecto, en esa mesa como contraparte estaba el gerente de proyecto, Rodrigo Toro, Ángelo Montaño y un asistente de él en el área comercial», añade.
Relata que la mesa iba avanzando bastante bien, «uno de los primeros hitos era sacar adelante un seminario donde nosotros íbamos a dar a conocer los niveles de diálogo y entendimiento que había entre una corporación territorial enfocada a la protección del medio ambiente y la industria inmobiliaria».
«Finalmente terminamos haciendo el seminario solos, porque Ángelo Montaño fue removido de la mesa por su jefatura directa, me imagino que por el gerente general, que es Héctor Ponce, y apareció la figura de un relacionador público o encargado de asuntos territoriales, que es Claudio Covacevich, y al mismo tiempo desapareció Rodrigo Toro», agrega.
Conejeros explica que antes del alejamiento en la mesa de trabajo, el acuerdo era rediseñar el proyecto inmobiliario, «había una apertura a hacerlo, y era tal como salía en el petitorio que fue aceptado por la inmobiliaria».
«En este petitorio había varios puntos que tenían que ver con infraestructura, equipamiento, educación, rediseño del proyecto, entre otros elementos, cuyos beneficiarios eran los vecinos de La Florida», señala.
Recalca que hay otro hito importante que se dio en una reunión que tuvieron con el alcalde Roberto Jacob, la corporación ambiental y la inmobiliaria, «el gerente general Héctor Ponce se comprometió a que nos hiciéramos cargo de agrupar a personas que estuvieran en búsqueda de vivienda, porque ellos disponían de un terreno cercano donde se proyectaron estas 1.300 viviendas, para hacer otras del tipo social, y para eso necesitan tomar contacto con agrupaciones como comités de vivienda, y cumplimos con eso, pero a la fecha no sabemos en que está».
Conversaciones
congeladas
El dirigente señala que las conversaciones se congelaron en julio del 2022, «en una reunión con Héctor Ponce y Claudio Covacevich nos comunican primero que no iban a apoyar el seminario, que era el hito más importante nuestro para informar a la comunidad sobre lo que estábamos trabajando, que fue la primera señal de quiebre, y probamente las comunicaciones se retomarían en octubre del año pasado, cosa que no ocurrió».
«Desde ahí empezamos a alegar, porque había un pliego firmado, donde no hay nada antojadizo, sino que son peticiones que la industria debería tener incorporadas dentro de sus visiones, se hizo un acto público en donde llegó Inmobiliaria Habita, nosotros, algunas autoridades, como concejales, el senador Matías Walker, Ricardo Cifuentes», agrega.
Destaca que «el compromiso de que el bosque no se iba a tocar se firmó entre la inmobiliaria Habita, el alcalde y nosotros, y hemos apelado a que se deben retomar las conversaciones, porque están todos los puntos pendientes».
Aun así, señala que al día de hoy los trabajos están a 20 metros del bosque, «diría que están en una subfase 4 de un total de 7, y más adelante definitivamente desaparece».
Invalidar RCA
El proyecto inmobiliario obtuvo su Resolución de Calificación Ambiental (RCA) en julio del 2018, pero Conejeros señala que comenzar a analizarla y estiman que es posible impugnarla, «para eso estamos recopilando antecedentes».
Consultado si tenían pensando ir al Tribunal Ambiental, explica que «así como está la situación, la institucionalidad está un poco frágil, el gobierno ha enviado señales que han provocado en las agrupaciones ambientalistas una cierta incertidumbre, porque se suponía que partió con un eslogan de un gobierno ecologista, pero se han tomado decisiones y se ha dado luz verde a proyectos que son complicados».
«Hay una institucionalidad, un organismo y una normativa, y por tanto la RCA que permite el desarrollo del proyecto está validada, fue aprobado por una institución que se acoge a las normas que tenemos, pero uno siempre tiende a apelar a que se omitieron ciertas cosas que ocurrían en ese ecosistema para obtener la aprobación ambiental y es lo que estamos indagando», agrega.
A modo de ejemplo, señala que existe un humedal y hay crianceros, «otros aspectos son más éticos que se deben tener hacia el medio ambiente, y en eso nos enfrentamos a personas que no tienen aprecio a la especie del eucalipto, que si bien no es nativa, todos los árboles trabajan para un ambiente respirable».