En virtud de las molestias expresadas por la dirigencia del comercio formal del centro de Coquimbo, en nota publicada este miércoles por Diario LA REGIÓN, por la instalación de a lo menos 25 vendedores ilegales en diversos tramos de la calle Aldunate, lo que les genera una competencia desleal, el concejal Alejandro Campusano pedirá a la Gobernación del Elqui que solicite más Carabinerospara que acompañen a los Inspectores municipales a hacer controles de las personas que no cuentan con algún tipo de permiso para ejercer comercio ambulante.
«Nosotros como municipio estamos preocupados siempre de este tema de los ilegales, ya que no hace muchos ellos se tomaron dos calles del barrio Baquedano, pero necesitamos apoyo del Estado para solucionar este tema, porque si bien el municipio ha contratado a más Inspectores, todos sabemos que el contingente de Carabineros ahora está enfocado en el tema de control de hechos violentos realizados por sujetos que actúan aprovechado las marchas pacíficas del movimiento social, por esos recurrimos a la Gobernación del Elqui, que nos ayude para pedir más contingente policial para fiscalizar al comercio ilegal callejero».
La autoridad aclaró que si no hay fuerza pública los Inspectores pueden ser agredidos, como ha ocurrido en casos anteriores al momento de fiscalizar a vendedores sin permiso en distintas zonas de la comuna, «todos sabemos que los Inspectores municipales sí pueden cursar infracciones, pero para desalojar a los infractores se necesita del apoyo de Carabineros, por eso hacemos el llamado a la Gobernación, para que trabaje con el municipio, porque este problema no es solo del centro, porque yo me he reunido con los sindicatos de comerciantes formalizados de Baquedano, que también están aproblemados, porque los ilegales se tomaron su sector, y lo otro es que también tenemos siete locales de máquinas de juego, que estaban clausurados por decreto municipal, que volvieron abrir, y eso es grave».
Campusano explicó que hará a la brevedad la indicación a través del Consejo comunal de seguridad ante la Gobernación, para hacer un operativo de control más a «fondo» en el casco céntrico porteño, antes de Navidad si es posible, en vista que el comercio establecido del centro espera esa fecha para tener un repunte en sus ventas, que han mermado en un 80 por ciento a raíz del estallido social.
«Tengo que decir que por el actual panorama nacional, enfrentamos un cesantía de dos dígitos producto del cierre de pequeños comercios afectados por saqueos y robos, por lo que la solución al comercio ilegal debe ser integral, y que la proliferación de este tipo de comercio es la punta del iceberg, y yo, como integrante del Consejo comunal de seguridad pública, siempre he sido enfático en decir que necesitamos mayor coordinación con la Gobernación, que es el nexo que tenemos con ambas policías, y así buscaremos trabajar en conjunto para lograr la normalidad en nuestro centro. Por eso solicitaré una fiscalización junto a Carabineros a través del Consejo comunal de seguridad, para ver si se puede realizar la próxima semana».
