A 17 días del mayor robo de la historia, en el que un grupo de delincuentes huyó con $6 mil millones desde la losa del Aeropuerto Internacional Arturo Merino Benitez, la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) admitió, por primera vez, falencias en los protocolos de acción.
“Hubo protocolos que no se cumplieron, hubo cierto relajo”, sostuvo el secretario general de la DGAC, Ricardo Gutiérrez, quien reconoció que estos recintos “no son fortalezas”.