Acusaciones expuestas a la Contraloría son por «eliminar» a funcionarios mal evaluados por la comunidad y no contaban con los requisitos académicos para los cargos y/o cercanos a la administración anterior. Ello para favorecer la contratación de familiares y personas que participaron en su campaña electoral. El jefe comunal reconoce que cometió «errores» en no chequear los antecedentes, pero desmiente las presuntas faltas.
El alcalde de Andacollo, Gerald Cerda, solicitó la renuncia a la directora Jurídica, Sandra Rivera, luego que ésta presentara una denuncia ante la Contraloría General de la República acusando al jefe comunal de faltas a la probidad y conflicto de interés para favorecer a familiares y contratar a personas que participaron durante su campaña electoral.
En el documento ingresado al ente fiscalizador, Rivera expone que Cerda le comenta que una de sus promesas de campaña era «eliminar» a funcionarios que no eran percibidos positivamente por la comunidad, además de otros que no contaban con los requisitos académicos para ostentar los cargos, o individuos que pertenecían al sector político del alcalde anterior, Juan Carlos Pizarro, incluso algunos eran acusados por «mal aspecto personal». Entre estas cualidades estaban algunos directivos, como la jefa del Departamento de Personal; la directora de Administración y Finanzas; la jefa del departamento de Aseo y Ornato; la directora (s) de Desarrollo Comunitario; la encargada de la Oficina de Deportes, la jefa del Departamento del Medio Ambiente, y el jefe del departamento de Turismo y Cultura, además de otros funcionarios y servidores municipales.
Junto a ello, según consta en la denuncia, la instrucción era realizar los cambios para modificar dependencias y funciones que afectaban a otros dos funcionarios, además de mejorar las condiciones laborales de personal municipal que participó directamente en la campaña de Cerda, incluso contratar a los hijos de estos servidores municipales.
Una imputación adicional de la abogada Rivera alude al aumento en las facultades que transfirió el alcalde Cerda hacia la jefa del Departamento de Cultura, Yasna Pizarro, para certificar esas nuevas contrataciones, sin embargo, ésta tiene un lazo de parentesco con el jefe comunal y acusaciones de hostigamiento y malos tratos a otros funcionarios municipales.
Respuesta
En relación a la denuncia realizada por la ex Directora Jurídica de la Municipalidad de Andacollo, Sandra Rivera González, el alcalde Gerald Cerda emitió una declaración a Diario La Región, expresando que efectivamente con fecha 21 de diciembre en 2021 procedió a solicitar la renuncia de Rivera, «luego de innumerables errores y desaciertos como asesora jurídica».
«A ello se sumó una denuncia recibida respecto de su pasado como abogada en la Defensoría de la Niñez, que la vinculaba a un comportamiento profesional tan cuestionable como el que evidenció en este Municipio y del que hace gala nuevamente, publicitando una denuncia repleta de falsedades e indecoroso comportamiento profesional por sobre todo de principios éticos como persona», refuerza Cerda.
Según el jefe comunal, en la denuncia la ex jefa jurídica indica que intentó favorecer la contratación de una tía para que preste servicios en el Municipio, lo que «es falso». «En rigor, la persona aludida por la señora Sandra Rivera, con la que efectivamente me une una relación de parentesco, era funcionaria del Municipio desde 2016, es decir, 5 años antes de mi ingreso como alcalde», precisa. Y agrega que fue la propia dirección de Desarrollo Comunitario quien «me hace presente la voluntad sobre la necesidad de que la persona aludida pudiese acompañarlo en labores administrativas debido a su experiencia previa».
«Consultando a otros abogados, opté por ordenar la regularización interna de la situación, retrotrayéndola el estado en que se encontraba la funcionaria antes de mi asunción como alcalde, dado que no sería justo privar a una persona de fuente laboral de más de cinco años por la inoperancia ajena. Asimismo, mencionar que respecto a familiares solo se trata de dos personas, una es la persona que la señora Rivera alude y la otra es una familiar con 11 años de carrera previos también antes de mi instalación», acota, siendo estas las únicas personas con parentesco familiar.
Respecto a la supuesta intención de perseguir o denostar a determinados funcionarios municipales, «la desmiento categóricamente», dice Cerda, y explica que «durante mi campaña recogí testimonios de cientos de vecinas y vecinos de la comuna respecto del comportamiento de algunos funcionarios del Municipio, y naturalmente al asumir como alcalde consulté los mecanismos legales y jurídicos para retornarlos a sus puestos de trabajo, toda vez que la administración anterior removió personal a puestos distintos a los que desempeñaban habitualmente semanas antes de mi incorporación «La abogada Rivera utiliza tal recurso para indisponerme frente a funcionarios del Municipio, incluidos algunos que han sido protagonistas en esta administración y a los que les tengo particular aprecio», añade.
Complementa que «es natural» que al cambiar una administración Municipal se produzcan movimientos de personal propios de la instalación de los equipos, «lo que hemos intentado es que sea lo menos incómodo posible para quienes ejercen funciones de estrecha colaboración».