No fue la despedida que se esperaba, jugando en La Portada, para el capitán de Deportes La Serena. Porque ayer fue el último compromiso para Mauricio Salazar jugando con su público, el que llegó en gran cantidad para brindarle un aplauso por los más de 500 partidos jugando con la granate en el pecho.
No fue el mejor adiós para el goleador histórico. Porque Deportes La Serena cayó por 1-2 frente a Ñublense. Aunque por una vez, la historia pudo ser diferente. Porque comenzó ganando con gol de Lucas Cano cuando el reloj marcaba el minuto diez de la primera fracción. Pero el granate, como ha sido una constante durante todo el torneo, cayó presa de sus propios errores y dejó escapar un partido que quedará en la memoria del Mauro Salazar.
Es que la gente asistió a La Portada para ver al capitán. Y terminó molesta. Aunque el momento emotivo se vivió a los 66’, cuando Salazar fue reemplazado, desatando la ovación del público. El hincha se puso de pie para inmortalizar el instante. Y él, con los brazos en alto, lo agradeció. Y aplaudió.
Por lo mismo, tras el compromiso las miradas estaban puestas en el capitán.
“Es difícil dimensionar el cariño y las cosas que van pasando, ya que cuando uno comienza en el fútbol no espera ciertas cosas. Nunca las buscas, pero se dan solas, así que feliz por todo el cariño que me entregó la gente hoy (ayer), pero también a lo largo de toda mi carrera. Lamentablemente no se pudo ganar y me hubiese gustado haberme retirado con una victoria, pero me voy contento por el cariño de mis compañeros, por el saludo y por el aprecio también de todos mis ex compañeros, con quienes he tenido mucho contacto en los últimos días. También agradecido de la gente y del alcalde por el gesto que tuvo en la semana. De verdad que me voy muy emocionado”.
Consultado por despedirse como un ídolo de la institución, aclaró que “en Deportes La Serena siempre hay que dejarlo todo. Tenemos más de sesenta años de historia y muy pocos títulos. Es que todo acá ha sido difícil, porque el equipo no tiene mucho presupuesto, hay mil cosas, entonces acá se juegan otras cosas, donde siempre hay que dejarlo todo. Los títulos nunca me quitaron el sueño, no es algo que me importe. No busqué el cariño de la gente, tampoco busqué que me hicieran homenajes.
Todo esto que me ha pasado a lo largo de mi carrera es porque la gente se identificó conmigo. El hincha sabe todo lo que entregué en la cancha, todo lo que hice por el club. Quizás pudimos haber conseguido muchas más cosas, pero no se pudo”.