Si bien es cierto el hecho no pasó de las amenazas, la comunidad educativa se encuentra cansada debido a que el hecho no sido subsanado de raíz. Hace una semana se informaba de la delicada situación, donde apoderados exigían saber de qué computador emanaron las duras amenazas que sacuden en la comuna de Vicuña.
Por Instagram se están difundiendo las amenazas en grupos internos confesiones pertenecientes de estudiantes del establecimiento en cuestión». Se trata del colegio Domingo Santa María, recinto que arrastra el dilema de una amenaza virtual que tiene en jaque a sus autoridades
«El 11 de octubre haré un tiroteo en el colegio, estoy harto de todos, prepárense», decía el escrito. Ayer hubo varios alumnos que se quedaron en casa, aunque la seguridad del recinto habría estado garantizada.
María Fernanda Núñez Vega, Directora Colegio Domingo Santa María a través de un comunicado informó que el recinto se encargó de anticiparse a la jornada del martes, protegiendo el perímetro. Además de estar trabajando en políticas antibullyng y que la denuncia ya está puesta en la Brigada del Ciber Crimen de la Policía de Investigaciones.
«Queremos comentar que debido a la situación de amenaza que hoy vive nuestra comunidad educativa, se han dispuesto todas las normas de seguridad para el resguardo de nuestro colegio y cada uno de sus integrantes. Entendemos que todas las amenazas se deben atender como si fueran ciertas y ante estas se debe actuar con prontitud y cautela.»
Carabineros de Chile y Policía de Investigaciones estuvieron desde temprano en los ingresos de del colegio. El objetivo era vigilar y estar atento a cualquier acto, ya que nunca se podría saber la real intención del responsable que emitió el mensaje altamente divulgado.
«También volvemos a informar que esta situación se encuentra en Fiscalía, para ser investigada y se pueda dar con los autores de esta situación que ha afectado tanto nuestra comunidad educativa», señaló la autoridad del recinto.
El ID del pc es clave para los peritos de la PDI esclarezcan el conflicto. Detectives llegaron hasta el sitio de los hechos y entrevistaron a parte de la comunidad aterrada por el presunto atentando que no pasó a mayores.
«Ojalá esto llegue a su fin y encuentren al responsable por qué de verdad hoy al dejar a nuestros hijos en la escuela quedamos como padres con el corazón en la boca y rogando que no pase nada es una situación muy complicada», dijo la apoderada Elliet Quiroga a LA REGIÓN.
