En Santiago, la Policía de Investigaciones, PDI, capturó a David Marcelo Camblor Durán, de 21 años, imputado de dar muerte el 29 de marzo en la capital en medio de una transacción de droga a Andrés Garrido Campos, 41, todos integrantes de la banda de 8 sujetos que fue apresada este sábado en Illapel transportando en un camión tres mil kilos de pasta base de cocaína, clorhidrato de la misma sustancia y marihuana.
Camblor, según las pruebas recabadas por la PDI, junto a otro miembro de la organización delictual Matías Bastián Besoain Sepúlveda, de 22 años, que fue arrestado en Illapel, el 29 de marzo pasado contactaron a Andrés Garrido para comprarle, en una suerte de negociación independiente, 20 kilos de droga citándolo en avenida Ossa con calle Capricornio de la comuna de La Cisterna.
En medio de la venta, Camblor extrajo un arma de fuego, disparando al «vendedor» en 14 oportunidades, principalmente en la cabeza y en el pecho dejándolo abandonado al interior de una camioneta del tipo usada en minería que conducía, en la que llevaba paquetes con cocaína pura, marihuana y pasta base de cocaína cuyo contenido pesó en total 75 kilos.
Pista clave para «megadecomiso»
La muerte de Garrido comenzó a ser indagada por la PDI, que logró establecer que el occiso era parte de un organización liderada por los hermanos Sergio Peña Torres y José Peña Torres, dedicada a realizar grandes internaciones de droga al país, tras adquirirla en la frontera de la Región de Antofagasta a proveedores bolivianos, usando un sistema de traslado en camiones mineros escoltados por camionetas similares a las usadas por empresas mineras, de similares características a la que usaba la víctima.
Es así que los investigadores, junto al Ministerio Público, desarrollaron pesquisas durante tres meses, en la denominada Operación «Capricornio», estableciendo la identidad de los traficantes y su «modus operandi», definiendo que traerían desde Antofagasta un «cargamento» con rumbo a la Región Metropolitana en un convoy de vehículos que pasaría por Illapel el día sábado 5.
Es así que la PDI, que estableció que la organización previemente ya había trasladado dos grandes cargamentos, montó un operativo de captura en el área de Los Pozos, lugar en que fueron capturados Matías Besoain, Carlos Mondaca, Jordan Challapa, José Peña y Sergio Peña, Mauricio Ponce, Carlos Tapia, y Marcelo Fontealba que llevaban en un camión con tolva, ocultos en sacos, paquetes enhuinchados contenedores de pasta base de cocaína, marihuana y clorhidrato de cocaína cuyo peso era de tres toneladas en conjunto.
Esa sustancia era suficiente para más de 28 millones de dosis que podrían generar ganancias por 33 mil millones de pesos según estimación policial.
Durante el arresto Ponce resultó herido leve luego de ser impactado por el arma institucional de un policía, al que intentó atropellar con el camión que guiaba.
Además del camión los imputados que portaban cuatro armas de fuego junto a abundante munición y que usaban overoles de trabajo, radios portátiles y teléfonos satelitales para comunicarse, usaban tres camionetas que hacían de escoltas para evitar controles de la autoridad, al fingir que trasladaban minerales.
Todos los apresados, cuatro de los cuales cuentan con antecedentes penales previos, fueron puestos a disposición de los Tribunales de la capital, para ser formalizados en la investigación por infracción a la ley 20.000 de drogas.
El grupo delictual era liderado por los hermanos Peña Torres, quienes en calidad de financistas eran los encargados de organizar, dirigir, planificar y ejecutar las operaciones de internación de droga desde la frontera norte de Chile con Bolivia y su traslado a la capital.
Los cabecillas también realizaban los contactos con proveedores, a través de un elaborado sistema de traslado con controles en ruta mediante comunicaciones codificadas a través de un sistema de claves cuyo fin era alertar la presencia policial, utilizando términos distintos a la situación del entorno.