Gobernadora solicitó que fueran desalojados, pese a que estaban con un cartel y de manera pacífica. Consejeros Regionales debieron intervenir. «Qué triste, nunca se había visto esto en el Gobierno Regional», dijo Tatiana Castillo
A las 16 horas en punto dirigentes de la Nueva Asociación de Funcionarios hicieron ingreso al salón Gabriel González Videla con una pancarta y la consigna: cero respeto, cero gestión.
El ingreso, mientras se desarrollaba la sesión del Consejo Regional, se hizo en silencio, incluso cuando hablaba un dirigente de la comuna de Coquimbo –luego lo hizo el alcalde- por la instalación de alcantarillados, demanda que lleva más de 15 años.
Si bien el objetivo era hablar con la gobernadora, esta fue negada pese a la petición de los consejeros regionales. «No tienen la palabra, porque hoy (ayer) se habló para tener reunión y no asistieron», les dijo Krist Naranjo.
El malestar era notorio en la máxima autoridad regional, por lo que solicitó la presencia de Carabineros, «quienes llegaron para supuestamente sacarnos, pero en ningún momento estábamos haciendo ningún acto delictual, solo pedíamos la palabra en una sesión porque los consejeros regionales querían escucharnos», dijo Beatriz Hidalgo, dirigenta de la asociación.
Sin embargo, lamentó que estuvieran al interior del edificio, «puesto que las sesiones del CORE son públicas y nosotros ingresamos en silencio. Al final todo se transformó en un desorden, pues nuestro objetivo era que nos viera, ya que nunca nos ha recibido.
Aprovechamos de pedir la palabra y decirle que queremos reunirnos con ella, y no que nos cite a reuniones minutos antes a través de la administradora regional…».
Entonces, un receso y la salida de la gobernadora, mientras los CORES no se explicaban lo sucedido, menos los dirigentes.
«Simplemente nos presentamos para manifestar nuestro descontento y que seguiremos haciéndolo mientras no cumpla con el petitorio que le hicimos llegar», dijo Hidalgo.
Lo que solicitan es que los funcionarios, que no son todos, vuelvan a sus puestos originales donde están sus competencias, «y nosotros también nos comprometimos a parar las manifestaciones y volver a la normalidad, pero no hemos tenido respuestas. No nos recibe la jefa de servicio, más bien la administradora y la jefa de gabinete, que en realidad no tienen ningún poder resolutivo. Eso estamos pidiendo, que resuelva las peticiones de una vez por todas».
Sin embargo, la molestia es que mientras ellos trataban de hablar y explicar sus demandas, otros funcionarios de confianza de la gobernada «anotaron a quienes estaban participando, entonces este es el nivel de situación que se vive en el Gobierno Regional, y lamentablemente nadie nos escucha. No se puede seguir trabajando de esta manera porque continúan las amenazas y los rumores de cambios. No sé cuándo vamos a parar, por eso le pedimos encarecidamente que cambie su actitud y que tenga la voluntad en lo queda de este año, de hacer cambios por el bien de los funcionarios».
Es lamentable
Lo sucedido, decían los consejeros regionales, no se había visto y por eso pidieron disculpas.
«Decepción, pero le pido a los funcionarios de confianza acá presente que puedan conversar con la gobernadora, y que este capítulo que estamos viviendo, sea el último. Todo lo que hoy estamos haciendo va en perjuicio de los proyectos, de los programas de la comunidad», sostuvo Lombardo Toledo.
Tatiana Castillo fue tajante: «es lamentable que los funcionarios tengan que llegar a esto y me da pena que Carabineros tenga que prestarse para esto, porque ella, la autoridad, los está llamando. Está utilizando a su gente y sus funcionarios lo están pasando tan mal como los otros funcionarios, todos enfermos de los nervios. Qué triste, nunca se había visto esto en el Gobierno Regional».
