Dieciséis equinos forman el staff con el que se inauguró el primer centro de hipoterapia de la cuarta región en sector Pan de Azúcar con un equipo multidisciplinario de kinesiólogos, psicólogos y profesores del área ecuestre.
El centro, que con anterioridad funcionó como escuela de equitación, nació de la inquietud de Américo Carrasco de contar con un lugar especializado en terapias con equinos. Para ello se contactó con el Centro de Desarrollo de Negocios de Sercotec quienes dieron seguimiento al proyecto y lo fusionaron con el trabajo que Máximo Pacheco, dueño del predio en donde hoy funciona el centro, había venido realizado. De ello nació el «Centro Ecuestre Santa Filomena», lugar que desde hoy alberga cuatro tipos de disciplinas que mezclan lo terapéutico con lo meramente recreativo.