Una adhesión sobre el 90% en la Región de Coquimbo estimó la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), en el primer día de la paralización nacional convocada por la Mesa de Negociación Colectiva del Sector Público, la cual se extenderá hasta hoy.
La movilización es un acto de protesta por el porcentaje de reajuste, de 4,1%, decidido por el gobierno para los ingresos de los trabajadores del estado en el año 2016. El rechazo es también por el término de las negociaciones que sostenían los gremios de empleados públicos con los ministros de Hacienda, Rodrigo Valdés, y de Trabajo, Ximena Rincón, quienes ya enviaron al Congreso Nacional el respectivo proyecto de reajuste, en el contexto de la discusión sobre la Ley de Presupuestos 2016.
Los trabajadores indican que el porcentaje mínimo aceptable es de un 5%, considerando la inflación del año en curso -estimada alrededor de un 4,4%- y el crecimiento económico 2015, que se espera bordee el 2%.
En el centro de La Serena unos mil empleados públicos de los más diversos servicios se reunieron para marchar, partiendo a las 10:30 en el frontis de los edificios públicos. “La adhesión ha sido espectacular, es una marcha como no teníamos hace tiempo, estuvieron presentes todos los gremios”, destacó la presidenta regional de la ANEF, Clara Olivares.
Sobre la preocupación expresada por funcionarios públicos que siguieron trabajando ayer, en cuanto que se encuentran en período de renovación de contratas y honorarios, por lo que se arriesgaban a perder sus empleos en caso de salir a protestar, la dirigente señaló que “si algún seremi o director de servicio se atreve a despedir a uno solo de nuestros funcionarios, que se apronte, porque él se va a ir antes que el funcionario, porque donde se despide un trabajador vamos a parar todos y vamos a exigir su salida, y no vamos a trabajar hasta que esa autoridad se vaya”.
Olivares criticó el acuerdo al que llegaron senadores de la oficialista Nueva Mayoría con el ministro de Hacienda, para aprobar un 4,1% de reajuste salarial. “Lo único que consiguen es que su popularidad, su reconocimiento en la ciudadanía, vaya cayendo aún más. Si los legisladores pretenden aprobar ese proyecto, quieren seguir con su negocio, que no se olviden que nosotros votamos e incidimos en la ciudadanía”, dijo.