El Consejo de Ministros declaró como Santuario de la Naturaleza al Cerro Santa Inés, que se ubica en la localidad de Pichidangui, en la comuna de Los Vilos, y que hace un par de años fue identificado como uno de los últimos bosques en Chile que mantienen vestigios de flora de siglos pasados.
Lo anterior, debido a que fueron disgregados por la última glaciación y que, por efectos del cambio climático y avances del desierto, actualmente se mantienen gracias a la presencia de neblinas costeras de la zona. Por lo mismo, se convirtió en una zona de alto valor ecológico, ambiental, paisajístico y de investigación, y en el año 2014, Minera Los Pelambres asumió el compromiso de su conservación con el propósito de recuperar sus 714 hectáreas y, principalmente, su bosque de olivillo -uno de los tres existentes entre las regiones de Coquimbo y Valparaíso-, considerado entre los más prioritarios de conservación de biodiversidad en Chile.
Desde que Minera Los Pelambres adquirió el Cerro Santa Inés se ha trabajado intensamente en un plan de recuperación y conservación para el resguardo de las especies que, además, cuenta con un sistema de vigilancia para prevenir incendios forestales e incluso la construcción y mantención de un cerco perimetral que ha permitido regularizar el ingreso de personas, vehículos y animales domésticos que pueden resultar invasivos para el entorno.
«Como parte de los compromisos ambientales de MLP, nuestra empresa ha apoyado y asumido el compromiso de protección y conservación de áreas naturales, promoviendo la designación de áreas protegidas y santuarios como el Santuario Las Palmas en Monte Aranda y ahora el del Cerro de Santa Inés en el sector de Pichidangui», señaló Carlos Tamayo, gerente de Medio Ambiente de la compañía.
El ejecutivo destacó que «al aplicar esta buena práctica estamos haciendo un aporte concreto a la biodiversidad del área donde operamos y generando múltiples beneficios al entorno de la zona».
Con esta declaración, aumentan las posibilidades para sumar organismos en este proceso de resguardo, además, de aumentar las alternativas de estudios e investigaciones de interés científico o del Estado.
Por su parte, el Seremi de Medio Ambiente de la Región de Coquimbo, Cristian Felmer, recalcó que «el cerro Santa Inés era uno de los sitios priorizados para su conservación en nuestra región, y el que se haya declarado finalmente como Santuario nos pone contentos, porque con esto podemos seguir ampliando la cobertura de protección de los sistemas frágiles que tenemos en un esfuerzo compartido con Minera Los Pelambres».
Cerro Santa Inés se suma a los otros tres Santuarios de la Naturaleza que también son protegidos por la empresa minera: Laguna Conchalí, Quebrada de Llau-Llau y Monte Aranda, todos en la comuna de Los Vilos. Por otra parte, se convierte en el séptimo de la región de Coquimbo, lo que, junto a la región del Maule, la sitúa en el tercer lugar de las regiones con más sitios de conservación en el país, luego de Valparaíso (13) y la zona Metropolitana (11).
Esta declaración ocurre pocos días antes de que la Comisión de Medio Ambiente del Senado aprobara tres mociones en pro del cuidado de la naturaleza y de las declaraciones de Santuarios, las cuáles apuntan principalmente a mejorar el resguardo de humedales, potenciar la participación ciudadana y proteger las áreas silvestres de pavimentación u otras intervenciones que signifique una real amenaza para su afectación.