Libro, editado por dos docentes del colegio Inglés Católico de La Serena, reúne relatos de 28 profesores, desde Iquique hasta Puerto Montt, durante los primeros cinco meses del año pasado.
La educación virtual en tiempos de coronavirus estará en la agenda, al menos, hasta fin de año. Llegó junto a la pandemia el año pasado. Con ello, también la brecha que existe entre la educación urbana y rural.
Asimismo llegaron las historias. Y de los profesores, hoy ya héroes, que desde Iquique hasta Puerto Montt plasmaron sus vivencias en un libro editado por los docentes Sebastián Órdenes (Historia y Geografía) y Miguel Ángel Rossel (Filosofía).
Un día del año pasado, en una de las tantas conversaciones después de una agotadora clase online, decidieron ambos docentes del colegio Inglés Católico de La Serena realizar «una recopilación de vivencias históricas del proceso que estamos viviendo», y para eso decidieron contactar a profesores a nivel nacional para que les contaran sus historias en los cinco primeros meses del año pasado en confinamiento.
El libro «Profesores en tiempos de pandemia» relata las diferentes realidades que existen entre los colegios urbanos, rurales, municipales, particulares y subvencionados.
«Tiene todas las vivencias, y desde un comienzo el objetivo era compilar lo que estaba ocurriendo en ese momento y dejarlo escrito, así que fuimos apoyados por dos premios nacionales de historia, quienes además hicieron el prólogo del libro», describen.
Historia activa
Todo, bajo el proyecto -del mismo colegio- denominado historia activa, en la que colaboran apoderados, profesores y alumnos de cuarto básico hasta cuarto medio, y quienes, cuenta Órdenes, «participaron en el libro dibujando lo que habían vivido, y después esos dibujos fueron integrados, por lo que cada tomo tiene dibujos de los alumnos y la historia de 30 profesores».
Cuenta el educador que en sus páginas se pueden encontrar testimonios de colegios rurales, por ejemplo del norte del país, como las ciudades de Chañaral e Iquique, «y de colegios de la ciudad de La Serena, donde logramos captar a unos siete establecimientos. Se encontrarán con historias humanas, emotivas, donde los profesores cuentan lo que tenían que hacer para realizar sus clases, o en otros casos buscar la forma de llevar el internet a las casas de los alumnos…».
En realidad, lo que pudo haber pasado en esos cinco primeros meses de pandemia del año pasado, «quedó escrito en este libro. Incluso, en algunos casos llegando el profesor a formar parte de las familias, visitando las casas de los chicos, llevarles los materiales para sus tareas. Es decir, distintas problemáticas y mucho desafío. Cosas buenas que se fueron dando en el camino, pero que nace a raíz de los problemas que tuvieron algunos profesores, como saber capacitarse, autocapacitarse, y tratar no sólo de buscar la dinámica para entretener a los alumnos en sus clases, sino intentar que la relación profesor-estudiante vaya más allá de la pantalla, preocupándose más de lo emocional que de lo académico. Entonces todas esas temáticas se van dando en el libro».
Todo rápido
Recuerda Órdenes que la primera vez que hablaron con sus colegas de la idea que tenían de contar sus historias en un libro, la respuesta fue inmediata y buena, «así que dimos un plazo de un mes y medio para que pudiesen redactar en 1.500 caracteres sus experiencias en pandemia, y llegado el tiempo recibimos las historias de la mayoría de los profesores con quienes hablamos -28 de 35-, más nosotros dos, que somos los coordinadores y coaturores».
Agradece la buena aceptación de todos sus colegas, cuyo libro finalmente fue sacado a finales del año pasado.
«De hecho, ya está entregado a los autores y el lanzamiento oficial queremos hacerlo cuando salgamos de esto, pues la idea es tener a algunos invitados», precisa. Por lo demás, cree a ciegas que este trabajo tendrá más relevancia con los años.
