La IA ya no es exclusiva de grandes corporaciones. En Chile, las pymes están descubriendo algunas herramientas que pueden optimizar sus procesos, reducir costos y aumentar su competitividad. Expertos explican cómo estas pueden acceder a tecnologías y transformar sus negocios.
En un mundo donde la transformación digital es clave para la supervivencia de los negocios, las pequeñas y medianas empresas en Chile están encontrando en la Inteligencia Artificial (IA) una aliada poderosa para crecer y competir en mercados cada vez más exigentes.
Según Carlos Araya, Doctor en Informática e Inteligencia Artificial y exalumno del MIT de Boston, «la IA no es solo para grandes empresas, pues hoy existen herramientas accesibles y fáciles de usar que permiten a las pymes automatizar procesos, mejorar la toma de decisiones y optimizar recursos».
Araya profundiza en cómo las pymes pueden integrar la IA en sus operaciones diarias, por cuanto dice que muchas empresas pequeñas piensan que la IA es algo lejano, complejo y costoso, «pero la realidad es que hoy existen soluciones diseñadas específicamente para ellas».
Por ejemplo, cuenta que herramientas como Make permiten automatizar flujos de trabajo sin necesidad de ser un experto en programación.
«Puedes conectar tu sistema de facturación con tu plataforma de correos electrónicos o tu CRM, y todo funciona de manera automática. Esto no solo ahorra tiempo, sino que también reduce errores humanos y permite que los equipos se concentren en tareas más estratégicas».
También destaca el papel de ChatGPT en la atención al cliente, pues imagina tener un asistente virtual que responde consultas frecuentes las 24 horas del día, sin necesidad de contratar personal adicional.
«Esto no solo mejora la experiencia del cliente, sino que también libera a tu equipo para enfocarse en problemas más complejos. Además, herramientas como DeepSeek permiten a las pymes analizar grandes volúmenes de datos de manera sencilla, lo que antes solo estaba al alcance de grandes corporaciones».
Significativa baja de costos
Enfatiza que el mayor desafío no es técnico, sino cultural, ya que muchas pymes «tienen miedo» de dar el primer paso porque piensan que la IA es complicada o porque no tienen el presupuesto para implementarla, «pero la verdad es que los costos han bajado significativamente, y los beneficios superan con creces la inversión inicial. Lo importante es empezar con un piloto, probar una herramienta en un área específica del negocio y escalar a partir de ahí».
Para Javier Julio, gerente de Asoinco (Asociación Gremial de Industriales de Coquimbo), uno de los principales desafíos para las pymes es la falta de conocimiento sobre las herramientas disponibles y cómo implementarlas.
Al respecto, explica que «muchas empresas creen que la inteligencia artificial es algo extremadamente complicado y reservado para expertos en tecnología, pero la realidad es que hay muchas soluciones intuitivas y diseñadas específicamente para pequeños negocios».
Precisa que la inversión inicial no tiene que ser un obstáculo porque existen herramientas en la nube que permiten pagar solo por lo que se usa, «lo que facilita la entrada de las pequeñas empresas en este mundo. Además, iniciativas como las de IA Technolab son fundamentales para aterrizar estos conceptos que se ven tan complejos y lejanos, entregando las claves para comprender cómo se puede sacar el mayor provecho a estas nuevas tecnologías sin invertir mucho dinero».
Por lo mismo, advierte que es fundamental «que las empresas reciban capacitación y asesoría para entender cómo la IA puede adaptarse a sus necesidades específicas».
En Chile, iniciativas como las impulsadas por IA Technolab, en colaboración con asociaciones gremiales como Asoinco (Ver recuadro), están ayudando a las pymes a dar sus primeros pasos en la automatización de procesos.