Durante esta última semana, pacientes del Hospital de La Serena fueron notificados de que sus tratamientos serían postergados debido a la falta de Leucovorina, un fármaco que ayuda a reducir las reacciones adversas de los anticancerígenos.
Desde el Servicio de Salud, el director Ernesto Jorquera aseguró que «los laboratorios proveedores se encuentran con problemas de disponibilidad de stock en forma temporal, lo que ha repercutido en la distribución a los establecimientos de salud y, por tanto, en la falta transitoria de este producto».
Como servicio tomarán medidas para apoyar a los pacientes afectados, a lo que detalla que «el hospital dispone de una estrategia de acompañamiento para los usuarios por el tiempo que se mantenga la ausencia del medicamento. Además han implementado una línea telefónica para resolver las inquietudes y consultas de los pacientes».
Una situación compleja para quienes necesitan del tratamiento, sin embargo, se trataría de un desabastecimiento a nivel nacional causado por las dificultades en la producción que enfrentan los laboratorios. A pesar de esto, desde el Servicio de Salud y el hospital sostienen que es una realidad temporal, esperando que se mejoren las condiciones en la producción para que el reabastecimiento comience pronto.
Solo algunos son pausados
El doctor Javier Elorza, jefe de la Unidad Oncológica, hace énfasis en que «solo afecta a algunos esquemas de quimioterapia, no a todos. La gran mayoría de las quimioterapias se están desarrollando adecuadamente, porque no todas utilizan leucovorina. A los pacientes que lo utilizan se les agendarán las horas apenas vuelva el suministro normal».
Agrega que los pacientes pueden esperar un plazo razonable para poder reagendar, sin ningún perjuicio en sus quimioterapias.
«Estamos cautelando las distintas estrategias para abordar este problema en caso de que el quiebre del stock nacional fuese más prolongado. Pueden existir alternativas a nivel internacional para este medicamento».
Destaca la labor de información para con sus pacientes, «ya que hay una estrategia que es acompañar a nuestros pacientes. Lo primero es mantenerlos muy bien informados y llamar a la calma. El hospital está tomando todas las medidas para que apenas podamos contar con el fármaco, reinicien sus tratamientos. Hemos puesto ya una línea de WhatsApp (+56 9 2942 6395) para asistir todas las consultas y dudas que los pacientes afectados puedan tener y estaremos permanentemente preocupados por ellos».