En la Fenats siguen preocupados por el brote de casos
positivos en el recinto porteño y piden nuevas medidas
para evitar un desastre mayor. «En total tenemos 504
funcionarios sin trabajar y sin
reemplazo», cuenta la dirigente Iris Contreras
Los contagios en el hospital San Pablo de Coquimbo no paran. Este lunes el número aumentó exponencialmente y eso preocupa y molesta a los funcionarios de la salud. A sus dirigentes.
Y también incomodaron las declaraciones del subsecretario de Redes Asistenciales, Arturo Zúniga, quien hizo un símil de lo que ocurre en el recinto porteño con otros establecimientos «del hemisferio norte y Estados Unidos…».
«No nos podemos comparar con esos países que tienen más recursos y que aun así les fallan los elementos de protección, con mayor razón a nosotros, cuyos hospitales se manejan con un presupuesto anual que si se gasta no hay más plata durante el año», cuenta Iris Contreras Allende, presidenta de la Fenats del hospital porteño.
ESTA LA «EMBARRADA» EN TODOS LOS SERVICIOS
El número de contagios ha aumentado considerablemente «y literalmente tenemos la embarrada en todos los servicios», cuenta Iris. Y agrega: «Por ejemplo, de 12 enfermeras que trabajan en la unidad UCI Quirúrgica, quedan tres. En Medicina igual, pues tienes una plataforma de 18 paramédicos, seis por turno, y hoy tienes uno para la unidad. También hay una baja de enfermeras. Es decir que la mayoría de los equipos de salud
de las unidades clínicas están con déficit de personal».
Y si de números se trata, el porcentaje asusta. Esto, porque «hasta este lunes teníamos a 212 funcionarios de la salud con coronavirus, dos de ellos hospitalizados: uno en la UCI
y otro con un carácter menos grave en la unidad UTI de cirugía. También tengo a 256 funcionarios en cuarentena preventiva, más 36 funcionarios que están con contacto estrecho. En total tenemos 504 funcionarios sin trabajar y sin reemplazo, desarrollando más labores de las que normalmente hacemos», detalla.
En Coquimbo, la comuna con más contagios de la región, no es difícil seguir las primeras pistas del virus. Al menos un hilo conduce, según explica Contreras, luego que se
obligara a los funcionarios volver al trabajo en condiciones sanitarias inapropiadas, además de terminar con las segregaciones de los funcionarios. «A eso hay que sumar que nunca se realizaron las divisiones acrílicas para las áreas de las unidades de administración. Por llamar a la normalidad al hospital, una embarrada, un terremoto con tsunami para los trabajadores», cuenta molesta.
La semana pasada el hospital fue visitado por el subsecretario de Redes Asistenciales. Era el momento entonces para una reunión con la Fenats. «Se le hizo ver las falencias y le
exigió nuestro presidente (Mauricio Ugarte) una medida rápida y oportuna para los trabajadores de Coquimbo. Porque para ellos los indicadores no son alarmantes, pero para nosotros sí, porque están siendo afectados nuestros funcionarios, nuestros compañeros de trabajo. Hay un déficit de personal, una recarga laboral en los trabajadores, y también mental, por temor a verse desvalidos ante el sistema que entrega poca protección».
Es por eso que, «acá si te sientes seguro laboralmente vas a venir y cumplir con tu trabajo, pero si existe una inseguridad enorme, como ahora, te da miedo llegar, por más que
nos guste lo que hacemos. Y sí, estamos preparados para la muerte y todo el equipo de salud está acostumbrado a ver pérdidas, pero a esto no estábamos acostumbrados y todo
pasa por el empleador, que te debe entregar la seguridad laboral».
PIDEN CAMBIOS DEL EQUIPO COVID
«Este brote es inaceptable y el Comité Covid tiene que dar un paso al costado. Y le bajan el perfil porque no ven el contexto humano y lo fundamental que es el movimiento de
cada unidad con el equipo de salud.
Acá solamente ven estadísticas y no personas, no ven familias afectadas,incluso con menores de edad. Por eso para nosotros es impactante lo que estamos viviendo, y como representante de los trabajadores, que somos el gremio mayoritario, donde tenemos muchos socios afectados, hemos tenido que trabajar a full, porque hemos tenido que hacer la contención, las consultas…».