El miércoles 24 de febrero, trabajadores de una empresa contratista de la Municipalidad de La Serena, realizaban trabajos en un camino del sector rural entre las localidades de Las Rojas y Pelícana. En momentos en que efectuaban una excavación con maquinaria pesada encontraron una serie de restos humanos.
Ante ello, detectives de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones (PDI) acompañados de peritos del Laboratorio de Criminalística Regional concurrieron al lugar, tras un llamado del Fiscal de Turno. «Al reconocimiento externo realizado por los detectives, lograron determinar que los restos humanos corresponden a un cráneo, diversos huesos largos y cortos, específicamente costillas, vertebras, fragmentos de pelvis y coxis, los cuales se encontraban en regular estado de conservación y desgaste, porosos», manifestó el subprefecto Jaime Rojo, Jefe de la Brigada de Homicidios de La Serena.
Pudieron determinar que la data de las osamentas es superior a 100 años, por lo que la información fue remitida hasta el Consejo de Monumentos Nacionales.
Consultada por LA REGIÓN, la coordinadora regional de entidad, Daniela Herrera, afirmó que recibieron la información del hallazgo, aunque lamentó que las piezas hayan sido removidas de su posición original. «La idea es siempre dejarlos en el lugar, porque no es sólo la osamenta, puede haber mucho más relacionado y al moverlo se elimina mucho material importante, orientaciones, formas de entierros, y depende de cómo haya sido la muerte, si están en el fondo de quebradas, eso lo tienen que definir los arqueólogos después que hacen los análisis. Además, nadie puede asegura que sea sólo esta osamenta, sino que puede haber muchas más», .
De acuerdo a la Ley 17.288 de Monumentos Nacionales y Normas Relacionadas, «Toda persona natural o jurídica que al hacer excavaciones en cualquier punto del territorio nacional y con cualquier finalidad, encontrare ruinas, yacimientos, piezas u objetos de carácter histórico, antropológico, arqueológico o paleontológico, esta obligada a denunciar inmediatamente el descubrimiento al Gobernador Provincial, quien ordenará a Carabineros que se haga responsable de su vigilancia hasta que el Consejo se haga cargo de él. La infraccion a lo dispuesto en esta son una multa de cinco a doscientas unidades tributarias mensuales, sin perjuicio de la responsabilidad civil solidaria de los empresarios o contratistas a cargo de las obras, por los daños derivados del incumplimiento de la obligación de denunciar el hallazgo».
La coordinadora del CMN, indicó que en general la Región de Coquimbo es muy habitual el hallazgo de este tipo de vestigios. «Un hallazgo no es sólo una osamenta, un trozo de cerámico, una punta de flecha, también son materiales arqueológicos que nos pueden dar luces de las civilizaciones que estuvieron en los alrededores. Cuando la gente se los lleva se va eliminando esas pequeñas luces de asentamientos o lugares importantes. La región tiene muchos hallazgos y por eso es importante que la gente, las empresas y todos respeten esos lugares y no muevan las osamentas o las piezas»,.
Se espera que dentro de los próximos días, las piezas, junto con un informe de la Policía de Investigaciones, llegue a manos del Consejo de Monumentos Nacionales, entidad que tendrá a cargo su custodia y disposición final en depósitos especiales de museos de la zona o el país. Se espera además, que durante las próximas semanas lleguen arqueólogos de la entidad y visiten el lugar donde se realizó el hallazgo.