“Lograr esto fue algo merecido producto del trabajo realizado a lo largo del torneo. Coquimbo Unido es un equipo que en ningún caso debería estar peleando estas instancias, por ningún motivo. Se sufre mucho, los hinchas sufren mucho más que nosotros porque están fuera y sienten que no pueden hacer más porque el equipo logre resultados. Pero si lo hicieron en las últimas fechas, les agradezco infinitamente que hayan levantado al equipo en un momento crítico, nos unimos mucho más a ellos, creamos una sinergia importante…le debemos mucho”, fueron las palabras del técnico aurinegro Juan José Ribera, reflejando el sentir de la familia pirata que a partir del encuentro jugado en Valparaíso ante Deportes Temuco logró una unidad increíble en todos sus estamentos.
En lo deportivo, cabe recordar que las cosas no empezaron fáciles para los porteños, porque fue Barnechea quien abrió el marcador a los 3′ con un penal ejecutado por Renato Ramos.
Lo bueno fue la temprana reacción, ya que un minuto más tarde, Renato Tarifeño puso el 1-1 con un remate cruzado que dejó sin opción al meta Jorge Manduca.
De ahí en más el conjunto pirata se soltó y se acomodó al momento. Con seguridad, logró hacer su fútbol y comenzó a asegurar el encuentro con tantos de Joe Abrigo mediante tiro libre a los 26′, y de Leonardo Monje que a los 37′ finiquitó en la boca del arco tras centro de Ángel Rojas.
En el complemento, los piratas siguieron con el mismo libreto, esperando la reacción de los huaicocheros y aprovechando las opciones de gol. Así llegó el 4-1 momentáneo gracias al oportunismo de Abrigo que capturó un rebote para mandar el balón al fondo de las mallas.
Con los cambios y el correr de los minutos, los aurinegros se dedicaron a cuidar el triunfo, y aunque Barnechea logró venirse arriba y descontar a los 79′ con un remate de Francisco Levipán que estructuró el 4-2, no fue suficiente para borrar la alegría de todo un puerto que ahora respira con alivio por mantener la categoría luego de una sufrida campaña.
EL DOLOR DE BARNECHEA
Dos años descendiendo, primero de la A a la B y ahora de la B a la Segunda Profesional, completó el domingo Barnechea equipo que quedó último en la tabla con 23 puntos.
“Esto no es algo que sucedió puntualmente en este partido. Es un cúmulo de cosas que se vienen haciendo mal, que hay que repensar y ver qué se viene de aquí en adelante”, fueron las escuetas palabras del portero Jorge Manduca, quien es uno de los referentes del equipo huaicochero.
Y si bien el llanto y la desesperanza se vio en la cancha, después de la ducha en camarines los jugadores salieron con bastante templanza haciendo eco a las palabras de Manduca quien dio a entender que el descenso era la crónica de una muerte anunciada.