En la Plaza de Armas de Coquimbo, la sanitaria Aguas del Valle arrancó el proceso de participación ciudadana temprana (PCT) del proyecto de desoladora en el sector del Panul, en la comuna puerto. Segundo intento tras la arremetida en 2022 para levantar una planta multipropósito que garantizaría en el mediano plazo el recurso hídrico en la zona. «El segundo semestre de este año se ingresará al sistema de evaluación ambiental», dijo el gerente de la empresa, Andrés Nazer.
Desde que se anunció que la región de Coquimbo está enferma de un mal llamado «sequía», saltó de inmediato la opción de una desoladora.
Más de 15 años han pasado y no solo no hemos avanzado, sino que vemos como una región hermana, objetivamente «más chica» como Atacama, nos saca amplia ventaja en el tema. Ellos ya tienen la suya en Caldera, que permite producir hasta 450 litros por segundo de agua potable, teniendo la capacidad de ampliar su producción hasta los 1200 l/s.
Por eso que interesa el debate sobre la posible próxima construcción de una desoladora de agua para consumo humano en el sector de El Panul.
Proyecto técnicamente muy similar al presentado hace dos años, pero que vendría con «estudios más robustos en algunas materias (…), estamos llegando con estudios actualizados», señaló Andrés Nazer
En la jornada de miércoles, el portavoz de la sanitaria, acompañado el seremi de Obras Públicas, Javier Sandoval, y el diputado de Demócratas Víctor Pino, entregaron posturas similares en pos de agilizar la maquinaria y así destrabar luego el visto bueno para que Coquimbo comience a sanar de la escasez hídrica, que golpea duro a campesinos de las tres provincias.
Que no sea esta una promesa más incumplida por otro gobierno sobre este importante asunto. Y es que había sido el propio Presidente Gabriel Boric, en su última visita a Coquimbo, quien anunciaba el proyecto del Panul.
Además, en su Cuenta Pública, el magallánico fue enfático en poner a la zona como la número 1 en cuanto a prioridades en construcciones de estas infraestructuras. En su discurso del pasado 1 de junio en el Salón de Honor del Congreso, nombró tantas veces la palabra «desoladora» como «Coquimbo».
Durante ayer estuvieron en la famosa plaza de la «concha», hoy el PCT va hasta la Herradura (donde se reunirían con pescadores) y mañana a Totoralillo.
El sábado donde las «papas queman» en el mismo Panul, donde tienen diferencias con vecinos.
Se instalarán módulos con detalles acabados del proyecto. Stands que tendrán a especialistas que tienen como único objetivo informar a la ciudadanía interesada en conocer del proyecto.
Existe hasta un buzón donde la gente podrá poner recomendaciones. Ayer en el debut pasaron de las 100 interacciones.
«Este es un proyecto importante para las comunidades y la región, porque viene a reforzar y robustecer la capacidad que tiene la región para producir agua de una fuente nueva y distinta a la que hasta ahora se ha hecho en la historia», dijo el gerente de Aguas del Valle.
Hasta ahora siempre la producción de agua ha sido desde las aguas continentales a través de los ríos y fuentes subterráneas y lo que vamos a lograr con este sistema infraestructura es incorporar una fuente de agua de mar que reforzar el sistema y seguridad de agua para la región.
CAMBIO DE
PERSPECTIVA
DEL GOBIERNO
El proyecto marcha en el Ministerio de Obras Públicas, a través de la Dirección de Concesiones.
El seremi de la cartera, Javier Sandoval, subrayó que es prioridad el tema. «Debemos ponerle el acelerador a este proyecto de desoladora, que se hagan los estudios, que se presente al sistema de evaluación ambiental, para que después nosotros, como MOP, lo podamos licitar y que sea un servicio concesionado que de sustentabilidad y seguridad a la conurbación»
Con respecto a un supuesto volador de luces y un proyecto que nunca se concreta, la autoridad señaló que «yo creo que hoy estamos más cerca que nunca, con más avances concretos que nunca, que ninguna otra administración anterior lo había hecho, yo creo que la gente puede estar tranquila, que esta vez sí vamos a tener una desaladora para la región de Coquimbo, la primera de varias, quizás»
Sandoval señaló que la solución no va a ser llenar de desaladoras la región, sino una matriz de diversas soluciones que permitan no tener que depender de una sola tecnología o un tipo de fuente».
La autoridad dejó abierta la chance de que la sanitaria participaría como una empresa más en el proceso de licitación, «no está definido, pero queremos que cualquier empresa que participe sea del mayor estándar posible»
