Mediante pericias del Laboratorio de Criminalística, Lacrim, la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones, PDI, logró definir que los delincuentes que dispararon a la casa de calle Bernardo Peña, de El Olivar de La Serena, en la noche del lunes usaron una escopeta hechiza, con la que lesionaron a un niño de un año y dos meses.
La agresión ocurrió a las 19 horas, cuando la familia Espejo, estaba en la vivienda de calle Bernardo Peña, donde habitan varios niños.
Pero en un momento, las víctimas escucharon varias detonaciones que provenían de la calle.
En esos instantes, el dueño de la propiedad, comprobó que los ruidos eran escopetazos. En ese instante vio a uno de sus nietos de un año y dos meses, con sangre en la cabeza, por lo que lo llevaron de inmediato al hospital San Juan de Dios.
En ese centro de salud, los médicos trataron al lactante por dos impactos de perdigones en el área parietal izquierda del cráneo, las que fueron catalogadas como leves, por lo que fue dado de alta, bajo tratamiento.
Los afectados, interpusieron la denuncia ante las fiscalía y a la PDI, informando que no tenían rencillas con nadie, ya que todos los integrantes de la familia son personas de trabajo, vecinos de hace cerca de tres décadas de la población El Olivar.
Armamento
artesanal
El Subprefecto Jaime Rojo, jefe de la Brigada de Homicidios, indicó a Diario LA REGION, que las indagatorias están bien encaminadas, en vista de que las pruebas recopiladas, permitieron definir el tipo de armamento usado en el ataque.
«La primera tesis de investigación es que los individuos, concurrieron en un auto hasta la casa y desde el exterior dispararon hacia el inmueble, producto de lo cual el menor resultó lesionado leve en el cráneo. Ahora estamos haciendo un levantamiento de información en ese sector poblacional y un empadronamiento, a fin de definir la identidad de los imputados de los disparos».
Ahondado en el tema Rojo, comentó que los medios probatorios obtenidos, también dan cuenta del número de disparos realizados, «en el sitio del suceso recolectamos tacos plásticos, que corresponden a restos de cartuchos de escopeta, y lo más probable es que, como dije, las armas usadas son del tipo hechizo, con el que percutaron entre dos a tres disparos».
El jefe policial, confirmó que el ataque pudo haber ocurrido por una equivocación de los delincuentes.
«Los denunciantes son personas con una vida normal, que trabajan, por lo que acá no aparece un móvil de algún ajuste de cuentas, entonces podemos presumir que se equivocaron de casa, porque definimos que no hay una razón coherente para que desconocidos, decidan ir a disparar a un inmueble, además descartamos que aquí exista tráfico de drogas u otra motivación delictual».
Consultado por si hay registros de delitos similares en El Olivar en el último tiempo, el Subprefecto puntualizó, «no hay registros de esas características que haya ocurrido en el sector en los últimos meses».