Ánimos encendidos hubo durante la mañana de ayer en el concejo municipal de Coquimbo, tras el debate por aprobar el proyecto para la realización de la Pampilla 2015. El presupuesto, que en un inicio contemplaba una inversión de 1.038 millones de pesos, fue reducido a 998 millones luego de un ajuste por temas de instalación eléctrica.
La comisión organizadora, encabezada por Harold Quezada, presentó la propuesta al cuerpo colegiado la semana pasada, sin embargo, recibieron reparos por no haber considerado la participación de la Comisión de Concejales, integrada por Ramón Velásquez (PPD), Rosetta Paris (DC) y Jaime Díaz (PR), quienes se reunieron después para afinar algunos detalles.
Fuentes cercanas indicaron que no hubo tiempo suficiente para informar a los demás concejales sobre las modificaciones y el análisis de los presupuestos para esta versión de la Fiesta Más Grande de Chile, lo que gatilló el conflicto entre los miembros del concejo, que se extendió por más de media hora.
Y es que esta semana eran tres puntos en los que se debía tomar una decisión: la aprobación del Proyecto Pampilla 2015 (en general), una modificación presupuestaria y la autorización para proceder a licitar y contratar servicios por un monto superior a 500 UTM, donde se consideran Servicios de Producción de la Pampilla, Juegos Pirotécnicos y Juegos Populares.
Si bien el proyecto general de la Pampilla se aprobó por unanimidad, fue al momento de conocer el monto de inversión respecto al show de artistas lo que dividió las posiciones al interior del cuerpo colegiado, sobre todo por la modificación presupuestaria que aumentaba en 40 millones de pesos el monto destinado para este ítem, cuya inversión inicial era de $500 millones.
Cuatro fueron los concejales que se negaron a aprobar esta propuesta: Carlos Yusta, Juan Alcayaga, Paola Cortés y Ramón Velásquez, éste último, incluso, presentó su renuncia a la comisión (lo cual será evaluado por el concejo), apelando a que no se podía aumentar el costo del show de artistas por la inversión social de generar un espectáculo que sea del alcance de todos y que no ascienda el precio del evento.
Paola Cortés (UDI), indicó a Diario LA REGIÓN, que «no estoy de acuerdo con el dinero del show, que es demasiado en comparación con otras comunas del país, con excelentes artistas, donde se gastan entre 100 y 150 millones de pesos».
También hizo hincapié en que se deberá poner mayor preocupación en las bases de licitación del evento. «Espero que esta vez la productora que se gane el show de la Pampilla no sea la misma productora que tengamos el próximo año en las Primarias haciendo eventos ni tampoco en campañas. Se ve muy raro que desde hace años la misma productora que está en la Pampilla sea la que está apoyando en las campañas, ahí deja mucho que decir», enfatizó.
Juan Alcayaga que calificó de «excesiva» la cifra de inversión. «Estoy de acuerdo que nuestra gente merece tener artistas de primer nivel, eso sí, creo que debería haber otras posibilidades de propuestas. Es posible bajar los precios y que no sean tan altos como los que hay actualmente, lo que planteamos es que haya productoras que presenten una parrilla de artistas para ver cuál de todas nos conviene».
Frente a la señal de un posible «debilitamiento» ante la iniciativa del alcalde, algunos trascendieron que «no es el ánimo del concejo echar por tierra la iniciativa, sino más bien, lograr un consenso entre sus miembros para desarrollar la fiesta».