Parlamentario llamó al gobierno a dimensionar las preocupaciones que tienen hoy las familias de distintas zonas del país en que la delincuencia y el crimen organizado se tomó los espacios.
Tras conocerse las primeras diez de las treinta comunas que serán intervenidas en el marco del “Plan Calle sin Violencia” del gobierno, los diputados, Juan Manuel Fuenzalida y Natalia Romero, manifestaron sus reparos a las ciudades elegidas por el Ejecutivo para la implementación de esta iniciativa y lamentaron que “no se haya considerado la realidad que viven las comunas pertenecientes a las regiones de Coquimbo, O’Higgins, Maule, Ñuble, Los Ríos y Los Lagos”.
En concreto, los legisladores acusaron que en las regiones mencionadas “mantienen una alta tasa de criminalidad en sus territorios, y a nuestro juicio, fueron arbitrariamente discriminadas por el gobierno”. Por ello, Fuenzalida y Romero exigieron al Ministerio del Interior “dar a conocer los criterios definidos para escoger el primer listado de comunas que intervendrán policialmente, además de transparentar a la brevedad posible, el resto de las que se verán beneficiadas con dicho programa”.
“No podemos si no manifestar nuestra absoluta molestia y rechazo”, agregaron los parlamentarios, recalcando que, dentro del primer listado de diez comunas, nueve de ellas pertenezcan a alcaldes de partidos oficialistas o cercanos a ellos. “En materia de seguridad, el gobierno no puede ni debe actuar en función de intereses electorales, sobre todo considerando que el programa se financia con recursos públicos”, concluyeron Fuenzalida y Romero.