El siniestro, que requirió del trabajo de casi 80 bomberos para ser controlado, dejó una alerta por posible derrumbe, por lo que se emitió una orden de evacuación para las casas colindantes.
Juan I. Herrera Carreño
Durante la madrugada de este miércoles, un lamentable incendio sorprendió a varios vecinos del casco histórico de La Serena. Cerca de las 2 de la mañana, se informó el inicio de un siniestro en el pasaje Infante, entre calle Gandarillas y Cantournet, el cual terminó afectando a 3 propiedades, además de significar el corte del tránsito en el sector durante gran parte del día.
El inmueble donde se habría generado el fuego era utilizado como cité, en el cual se albergaban poco más de 10 personas, mayoritariamente de nacionalidad extranjera, mientras que las otras dos construcciones afectadas corresponden a una residencial para estudiantes universitarios de la comuna de Ovalle y otra, siendo la de menos afectación, una residencial de público general.
Procedimiento
Según explicó el capitán de la 2da compañía de Bomberos de La Serena, Juan Carlos Tapia, el llamado de la emergencia se realizó cerca de las 2:45 horas, tras lo cual comenzó un operativo que involucró a las 7 compañías de la comuna, por medio de 12 carros y cerca de 80 funcionarios.
«Cuando llegamos, las dos casas ya estaban envueltas en llamas. Hicimos el control, hicimos el confinamiento del incendio, un cortafuegos y logramos que no se propagara la tercera vivienda que está ahí. Eso estuvo bastante bien hasta que bajó el volumen de agua que teníamos disponible en el sector. Tuvimos que generar otra estructura de trabajo y eso generó que se nos pasara un poquito a la tercera casa, pero no sin perder el control del incendio». Comenta el capitán de bomberos.
Tapia asegura que, si bien este tipo de emergencias no son recurrentes, sí son de alto riesgo, debido a que «tenemos muchas casas que son colindantes que no tienen los sistemas de protección de incendios, como los cortafuegos», situación propia de la antigüedad de los inmuebles, a lo que se suman las características estructurales de las mismas.
«Como son estructuras que van empalizadas dentro del adobe, se van incendiando por dentro, debilitando la estructura», misma razón por la que se sostuvo la posibilidad de colapso y derrumbe de muros que superan los 4 metros, lo que requirió que bomberos pasara a un trabajo desde el exterior de los inmuebles.
Sin heridos de gravedad
Afortunadamente, el incidente no registró mayores afectaciones en la integridad física de los afectados; así lo expresó la alcaldesa Daniela Norambuena, quien suspendió el concejo agendado para esa mañana para volcar el trabajo del municipio a atender la emergencia.
«En total fueron 26 damnificados, entre ellos universitarios de la residencia de estudiantes que tenía el municipio de Ovalle. In situ vinimos con todo el equipo del Cesfam Emilio Schaffhauser, donde le tomamos los signos vitales y les entregamos los medicamentos a las personas que tenían o que padecen enfermedades permanentes». A lo cual suma el caso de una persona que, producto de una caída, se lastimó la rodilla, quien fue rápidamente atendido.
En respuesta a la emergencia, el municipio de La Serena dispuso de dependencias de la Corporación Municipal como albergues para los afectados, así como apoyar a la administración de Ovalle para reubicar a los estudiantes de dicha comuna para no afectar la continuidad de sus estudios.
El alcalde de Ovalle, Héctor Vega, quien acudió al lugar para atender a los jóvenes ovallinos, junto con agradecer a la edil, dio cuenta de que los 14 estudiantes afectados por el incendio en la residencia masculina fueron trasladados a la femenina, mientras que se gestiona el lugar que la corporación municipal dispondrá para mantener la cantidad de cupos para el beneficio de las residencias estudiantiles.
A su vez, anunció diversas ayudas. «Ellos quedaron sin nada, todos sus enseres y su ropa fueron quemados», expresó, por lo que dispuso de un minibús para quienes decidan viajar a Ovalle.
«También les vamos a prestar una ayuda monetaria, para que ellos puedan adquirir todo lo que perdieron, y a la persona encargada la vamos a reubicar para que pueda seguir apoyando a los niños cuando se encuentre en condiciones para retomar sus funciones», asegurando que de momento el municipio no ve necesario solicitar el apoyo de la ciudadanía.
