En la intimidad, se consideran como un grupo familiar que comparten diversas instancias. Se conocen muy bien porque su labor debe tener coordinación extrema y el apoyo incondicional. Desmienten ciertos mitos que la comunidad les ha impuesto a su quehacer y en la actualidad tienen un activo acercamiento a los grupos de la sociedad para mostrar su quehacer que se produce en manifestaciones o catástrofes.
Nelson Bersezio, es capitán de Carabineros, Subcomisario de Fuerzas Especiales Coquimbo y nos cuenta que lleva un año y seis meses en la zona. «El trabajo en la zona es bastante interesante. Hemos podido desarrollar una completa labor hacia la ciudadanía. En el rol de Fuerzas Especiales y Orden Público no ha habido muchas actuaciones, y las que ha habido han sido totalmente pacíficas».
La misión de Fuerzas Especiales es el orden público, pero están muy vinculados con la ciudadanía, con las situaciones de emergencia o catástrofe donde apoyan por ejemplo, entregando agua con el camión conocido como «Guanaco». Cubren servicios en el sector céntrico, nocturnos y eventos masivos como conciertos o partidos de fútbol.
La unidad, desde su creación el año 2009, tiene asentamiento en la Sexta Comisaría de Las Compañías y en la actualidad, se reconstruye el cuartel que está en Las Compañías, que antes era un hogar de menores. «Nosotros no teníamos un cuartel, y ese lugar estaba en constante abandono. Y por eso el alto mando de la región decidió repararlo y tener un cuartel de Carabineros más, con la finalidad de que la ciudadanía estuviera más segura en ese sector de Las Compañías y esperamos en septiembre poder hacer el cambio a esas dependencias».
En la unidad de Fuerzas Especiales y Orden Público, sostiene el Capitán Bersezio, «trabajamos personas, las cuales nos sentimos muy orgullosos de nuestro uniforme verde y aparte de eso, pertenecemos a una especialidad de la cual estoy muy orgulloso. Somos una verdadera familia que además tiene a su familia».
